Por fin lo dijo, con todas sus letras: recordemos cómo llegamos aquí. Y señaló a los culpables, los bancos y los reguladores.
El resultado, cientos de miles sin empleo, sin casas, sin el sueño americano.
2.No sirve un régimen parlamentario sin contrapesos, cuando una facción, en este casos los republicanos, no está dispuesta a que el presidente se lleve victoria alguna.
No pasan una sola ley, una sola iniciativa. Obama ha sido, por fuerza el presidente de la negociación sin resultado. Sus mayores iniciativas, cercenadas, como la ley de salud.
Hoy, el presidente dijo que luchará por la reelección (en épica sordina, claro, para quienes quisieran escucharle). 3.Mi victoria, matar a Osama (no es de Bush, no es de la derecha).
¿Y aquí? ¿Para cuándo "El Chapo"? 4.Anuncia muchas iniciativas y políticas que deberán ser aprobadas por las cámaras.
¿Lo logrará? Al menos ya tiene a quién culpar. Y creo que ya se hartó. Ahora sí lo hará, una y otra vez señalará a quienes se nieguen a recuperar la economía de Estados Unidos por razones políticas.
En México, en cambio, el presidente sigue sin poder ir a la Cámara de Diputados, a dialogar democrática y parlamentariamente. 5.Cambiar el código de los impuestos, reducir el hiato entre los ricos y la inmensa mayoría.
Obama anuncia lo mismo que aparece en la portada de The Economist: el nuevo modelo por venir es el Capitalismo de Estado... El capitalismo regulador con mucho mayor acceso al bienestar (salud, educación, vivienda) que en este capitalismo salvaje del consorcio.
30 por ciento de pago de impuesto para quienes ganen más de treinta millones de dólares al año, ¿cómo nos suena? Aquí, los ricos, no pagan impuestos, crean fundaciones.
6.Intento enfrentar la obstrucción con acción. Esa frase vale como ideario de buen gobierno sólo cuando la inmensa mayoría te apoya.
No es el caso de Calderón quien sigue sin recapitular en la mayor necedad del sexenio, la guerra contra el narco. Si hubiese visto The Wire: las guerras terminan, el juego es eterno... 7.Cómo movernos hacia adelante (así inició).
No es un asunto de retórica política. Es la única manera de sobrevivir. Y México, ¿cómo movernos hacia adelante? Me parece que en el estado actual de las cosas suena imposible.
Las campañas se convertirán en guerra sucia y ganará el que menos posibilidades tenga de sacarnos adelante. Y la propuesta de Obama, la que más me gusta, la que menos posibilidades tiene en la política actual: todos tienen que jugar bajo las mismas reglas.
Esa sería la verdadera regla de oro, la razón de ser de la democracia. Pero pregúntenle a los tarahumaras.