Vicente Aldape Ayala

Tendencias de ahorro en el alumbrado

Las nuevas tendencias en el alumbrado público para el ahorro de energía son para aprovechar las nuevas tecnologías que mantiene los niveles de iluminación, dar seguridad al ciudadano y disminuir el gasto por consumo de electricidad y mantenimiento con proyectos autofinanciables, ecológicamente y sustentables además de automáticos a través de sistemas de telegestión.

La tecnología en alumbrado público avanza constantemente y marca otra tendencia, los municipios buscan proyectos con tasa de retorno de no muy largo plazo, autofinanciable y escalable a nuevas tecnologías.

Esta tendencia lleva a los municipios a probar diversas tonalidades de luz (se mide en grados Kelvin), que van desde las muy blancas (azuladas) como led, a blancas de aditivo metálico de pulso de doble filamento (con vida de 40 mil horas) y nuevas tecnologías en sodio, luz amarilla con duración de 32 mil horas.

Algunas ciudades que con mayor o menor éxito han implementado algún proyecto de ahorro de energía en el alumbrado público son Monterrey, Durango y Aguascalientes.

La definición del tipo de tecnología a utilizar en el alumbrado público puede llevar a los ayuntamientos a quedarse allí o generar ahorros adicionales; con el cambio de iluminación se ha conseguido un ahorro de entre 30% y 37% y la instalación de equipos atenuadores o ahorradores es una estrategia más que permite además, una disminución en el consumo en horas de menor tráfico vehicular y peatonal sin afectar la seguridad.

La ventaja de estos sistemas radica en instalar un solo equipo por circuito (administrativamente es mucho menos costoso que aplicar un atenuador independiente a cada una de las en promedio 35 luminarias que integran un circuito de alumbrado) con una programación diferente para cada día del año y que además se controla desde el sistema de telegestión.

La suma del cambio de iluminación en combinación con el ahorrador de energía, generará ahorros de hasta 53%.
Los avances tecnológicos en iluminación y ahorro de energía son complementados con programas de telegestión que permiten mejorar la administración del alumbrado público.

Estos sistemas permiten la detección de fugas de energía, robo de cable, y generan ahorros de tiempo, combustible, materiales y energía que pueden ser de 7% al 10%.

En resumen, el tema del ahorro de energía se ha profesionalizado y los ayuntamientos y la iniciativa privada toman decisiones trascendentes en el ahorro de energía eléctrica.