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Juego del orgullo

Uruguay y Alemania chocan en el partido por el tercer puesto con fines muy distintos; para los teutones un triunfo significa poco, mientras que para los charrúas ganar en esta fase los convertiría en héroes
sábado, 10 de julio de 2010
Por: EL UNIVERSAL
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PUERTO ELIZABETH.-

Se enfrentarán en el mismo escenario, pero sus realidades no podrían ser más distintas. Alemania se medirá con Uruguay en el estadio Nelson Mandela con el único objetivo de terminar su participación en el Mundial para regresar a casa, mientras que La Celeste buscará tomar revancha de 1970, cuando los teutones los derrotaron 1-0 en el partido por el tercer lugar de la justa mexicana.

Los teutones llegaron a Sudáfrica como amplios favoritos, juntaron una mezcla de juventud y experiencia que los clasificó a la Copa del Mundo invictos, con 26 goles a favor y sólo cinco en contra, y únicamente dos empates.

En el Mundial continuaron con su poderío ofensivo, que los llevó a alcanzar la cifra de 13 anotaciones en sus primeros cinco partidos. Pero no fue suficiente para llegar a la final, pues España los dominó a placer y no dejó que desarrollaran su futbol, para vencerlos 1-0.

En cambio, nadie daba un peso por los uruguayos, que clasificaron de panzazo al Mundial vía repechaje ante Costa Rica, a la que apenas lograron vencer 2-1.

Para los charrúas el tercer lugar después de 44 años sin llegar siquiera a cuartos de final representaría un logro que los convertiría en héroes nacionales.

El discurso de Óscar Tabárez, técnico de La Celeste , contrasta con el del capitán germano Philipp Lahm. "El objetivo anterior fue luchar por ser al menos segundos.

No se consiguió, pero ahora tenemos otro, el de ser terceros, y vamos a pelearlo", mencionó Tabárez. "A Uruguay todavía le queda alguna cosa por hacer en este torneo".

"El equipo tenía un objetivo más alto que terminar jugando por el tercer puesto", dijo un decaído Lahm y agregó que ganar este partido no sería motivo para celebrar.

En el balance general, Alemania aventaja a Uruguay, pues ha ganado seis de los nueve enfrentamientos que han disputado, por sólo dos empates y una derrota en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Ámsterdam 1928.

Entre las victorias alemanas destacan las dos que consiguieron en Mundiales. Además del tercer puesto logrado en 1970, los teutones golearon a los uruguayos 4-0 en los cuartos de final de Inglaterra 66.

Veinte años después, en México 86, empataron 1-1 en primera ronda. Será la quinta ocasión que Alemania dispute el duelo por el tercer puesto, ostentando el récord de más presencias en la "pequeña final", seguido de Uruguay, que llegará a tres empatando a Francia y Brasil.

Para Die Manschaft, el único consuelo parece centrarse en Miroslav Klose, que se encuentra a un sólo gol de convertirse en el máximo goleador histórico de los Mundiales aunque, a diferencia de Ronaldo, dueño de la marca, el alemán lo haría sin consagrarse como campeón.

 

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