0
Votos
Nota Aburrida
Nota Interesante
Fuera máscaras, fuera manos

lunes, 3 de junio de 2013
Comparte esto en Facebook
Comparte esto en Twitter
Comparte esto en Digg
Enlarge Font
Decrease Font

Hoy en el ocaso de la gestión de los comités ciudadanos, muy pocos son los que pueden decir: “cumplí con mi trabajo”.



De cara a las próximas elecciones vecinales y a la consulta para el presupuesto participativo, que se llevarán a cabo el 1 de septiembre en la ciudad de México, el pasado viernes 31 de mayo Movimiento Pro-Vecino organizó el foro “Hacia una verdadera participación ciudadana”.


Dado que tanto el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) como la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) están más preocupados por el presupuesto que implican estos ejercicios, y no en ver si la Ley de Participación Ciudadana está cumpliendo con su objetivo, fue que decidimos poner a debate vecinal si los Comités Ciudadanos y los Consejos de los Pueblos han servido a sus comunidades o no.
En un ambiente de respeto, libertad, fraternidad, autoevaluación y sobre todo un gran sentido de comunidad, vecinos, líderes de organizaciones de la sociedad civil e integrantes de Comités Ciudadanos expusieron sus experiencias en los pasados tres años.

Los trabajos se desarrollaron en cuatro mesas simultáneas en donde se habló sobre la forma en que son electos los Comités y Consejos de los Pueblos, los cuales son integrados con la planilla ganadora y con algunos vecinos de las planillas que recibieron menos votos.


También se analizó si su labor ayudó a mejor la imagen urbana de la comunidad o si propició la organización y/o comunicación entre los vecinos.

Y como lo que no se mide no se evalúa y no se mejora, no podía faltar el análisis sobre los indicadores de evaluación y rendición de cuentas que considera el IEDF:
Cabe mencionar que, en marcado contraste con lo que ocurre en la vida real, hubo gran interés y valiosas intervenciones en la mesa que discutió el presupuesto participativo.


Además de los trabajos en las mesas (no a todo mundo le gusta hablar en público), se abrió la opción de un “buzón”, el cual estuvo disponible durante todo el evento, y para quien gusta del internet o no contaba con el tiempo para asistir se abrieron cuestionarios “en línea” en la página www.provecino.org.mx (que estará abierta hasta el 7 de junio).


Todas estas aportaciones, así como las actas levantadas en el foro y firmadas por los asistentes, serán la base para solicitar a la Asamblea Legislativa del DF que sea tomada en cuenta la opinión de los vecinos y en su caso se realicen las modificaciones pertinentes a la ley, ya que actualmente la elección de comités y la consulta sobre el presupuesto son ejercicios sumamente costosos y de muy escasos beneficios.


Hoy, a unos meses de que haya una nueva convocatoria, son pocos los vecinos que se interesen ya no se diga en integrar una planilla sino que no piensan ni siquiera molestarse en salir a votar.


Y es que parte del desencanto para participar en un ámbito que debería ser netamente vecinal se debe a la intromisión de los partidos políticos y de los gobiernos.


En efecto, en estos momentos sus operadores políticos ya están recorriendo las calles de las colonias para preparar el terreno de las elecciones y asegurar que sus afines quedan en “la planilla ganadora”.


Estos pseudovecinos están relamiéndose los bigotes por la tajada que puedan tener del presupuesto participativo y si acaso, alguien más se pone guapo como lo hizo Marcelo Ebrard en su momento, hasta un ingreso extra (que está fuera de la ley) les puede llegar.


Hoy en el ocaso de la gestión de los comités, muy pocos son los que pueden decir: “cumplí con mi trabajo”, ya que la gran mayoría no logró ni siquiera que su vecinos supieran de su existencia y ya ni se diga de sus resultados en beneficio de la comunidad.


Para que los comités funcionen no necesitan de desayunos con el Jefe de Gobierno (como también lo hizo Ebrard) ni que el IEDF, con tal de justificar su presupuesto, los sature de papelería innecesaria o de cursos que de poco les sirven.


Un gran paso en la dirección correcta sería la NO intervención de gobiernos y partidos. Dejar atrás la simulación impulsaría la participación ciudadana.

 

Opina sobre este artículo

Nombre   Email  
Título
Opinion

Perfil del Autor

Laura Elena Herrejón

Columnas Anteriores