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Leo Agusto y Los Ángeles del Gordo

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Respetemos al Gabo

jueves, 17 de abril de 2014
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EL UNIVERSAL

México tiene el privilegio y el honor de ser la segunda patria del escritor colombiano y Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez desde hace 50 años que llegó a vivir acá.

Después de publicarse en EL UNIVERSAL la noticia respecto a la seriedad de su estado de salud, los medios de comunicación se postraron en busca de la noticia a la entrada del Instituto Nacional de Nutrición, en los rumbos de San Fernando, donde permaneció internado por poco más de una semana.


Y no es para menos, García Márquez es por mucho el escritor vivo más importante en lengua española y la noticia atrajo la atención de los medios de comunicación más influyentes del mundo.


Sin embargo, ante ese interés público legítimo por conocer los detalles de los reportes de los médicos (algunas fuentes confirman el cáncer como diagnóstico), la familia del escritor después de agradecer dicho interés ha pedido respeto a su privacidad.

La situación es delicada, ya que a los 87 años los riesgos de complicación se acrecientan.
También el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se sumó a la petición de respeto a la intimidad y dijo a Radio Caracol Popayán, que es falso que se tratara de cáncer sino que García Márquez padece una neumonía que se complica debido a su avanzada edad.

Y es que el sólo nombre de la enfermedad asusta a cualquiera, más aún cuando se ha enfrentado a la enfermedad previamente siempre existe el riego de que aparezca de nuevo.


Pero más allá de los pormenores respecto al padecimiento del querido escritor Gabriel García Márquez, es un hecho que la decisión de convalecer en su propia casa y recibir sólo tratamientos paliativos ante el desfavorable diagnóstico se acerca más al deseo de un hombre de pasar los días que podrían ser los últimos de su vida en paz, alejado de la fría cama de un hospital y su entorno capaz de deprimir a cualquiera; y mejor vivir la fase terminal de su padecimiento de la manera más humana posible y esperar en la cercanía de su hogar y su familia el momento de su último respiro.


Periscopio
Que su cena no se convierta en la última. Si usted sale a conducir por carretera en estos días, revise los aspectos importantes de su auto: llantas, frenos, niveles de anticongelante, líquido para frenos, batería y transmisión.

No olvide revisar también el estado de la llanta de refacción, luces y limpiadores. Y muy importante: no conduzca si está cansado o tomó alcohol.

¡Felices pascuas!
En el radar
Vaya manera de celebrar Tláloc los 50 años de su traslado desde Santa Clara Coatlinchán, estado de México, hasta su actual lugar de residencia a la entrada del Museo Nacional de Antropología e Historia, en el Paseo de la Reforma.

Las tormentas que han caído en el valle de México han provocado daños rara vez vistos como el mercado en Peralvillo, la caída de árboles y la inundación de la Cineteca Nacional, que dejó varados a cientos de cinéfilos que se quedaron sin función en la Muestra Internacional de Cine.


Bitácora de lo absurdo
Desde las cero horas de este jueves entra en vigor la ley seca (parcial) en nueve delegaciones del DF. Es decir, en las delegaciones Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Cuajimalpa, Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Iztapalapa, Miguel Hidalgo, Tláhuac y Xochimilco; queda prohibida la venta de bebidas alcohólicas en vinaterías, tiendas de abarrotes y de conveniencia, supermercados y lo que se le parezca.

Es ley seca a medias porque la venta sí estará permitida para su consumo en restaurantes, bares y hoteles. Es decir, el gobierno del Distrito Federal dio un trato de adultos a quienes puedan pagarlo en una mesa o en una barra.

Mas no así al pobre que compra lo que se le antoje beber para llevarlo a su casa. A ese ciudadano, la jefatura de gobierno lo trató como a un adolescente de 15 años.
Nos arrobamos en Twitter: @LeoAgusto


EL UNIVERSAL

 

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