Aunque las autoridades no han determinado aún las causas de la muerte, este podría haber fallecido por diversas complicaciones debido a las condiciones dentro de la cabina; entre ellas asfixia, pues después de un tiempo tan prolongado, el oxígeno en los tanques pudo haberse agotado.
De acuerdo con el departamento de medicina de la Universidad Johns Hopkins, una de las más prestigiadas en este campo en Estados Unidos, la presión dentro de las cámaras hiperbáricas puede ser desde 1.5 hasta 3 veces mayor a la normal, por lo que su uso conlleva ciertos riesgos y debe ser cuidadosamente monitoreado.
En la cámara se respira oxígeno puro y los tiempos de las sesiones varían desde tres minutos hasta varias horas. Algunas personas pueden necesitar de pequeños descansos para respirar aire 'normal' y así prevenir que los tejidos absorban demasiado oxígeno, lo que podría llevar a una intoxicación.
La dosis de oxígeno en cada tratamiento debe ser determinada específicamente dependiendo de la salud general del paciente, su historial clínico, su edad y el padecimiento que tenga, para reducir el riesgo de efectos secundarios y complicaciones.
Algunos de los efectos más leves son fatiga y mareo, así como dolor de oídos y/o de cabeza, adormecimiento de las extremidades y descoordinación motriz.
Por otro lado algunas complicaciones más serias pueden incluir daño en los pulmones, ruptura del oído medio, daño en los senos nasales, y cambios de visión que pueden llegar a causar miopía.
Tras un tiempo prolongado en la cámara, puede incluso presentarse intoxicación por oxígeno lo cual puede causar falla pulmonar o fluido en las vías respiratorias, que si no se atiende llega a provocar asfixia o ahogamiento.
En los casos más extremos también puede causar convulsiones.
El departamento de medicina de Johns Hopkins señala que estos efectos secundarios suelen ser leves, siempre y cuando la terapia no dure más de dos horas y la presión al interior de la cámara sea menor a tres veces la presión normal.
Cabe destacar que, además, el oxígeno puro es un gas altamente flamable por lo que debe ser manejado con cuidado.