Alíber López

Optica Política

Optíca Política

Si Emilio Chuayffett Chemor, Secretario de Educación, echó la culpa a los padres de familia, de que los alumnos practiquen el “bullying”, para presuntamente, eximir a los maestros de sus responsabilidades y a otras instancias de la sociedad, o tratar de quedar bien con ellos, cuando les ha estado aplicando “bullying” con las reformas educativas, no la consideramos una posición racional.
Hay una explicación clara al hecho de que muchos padres y madres de familia no protejan y eduquen a sus hijos en el respeto, la disciplina y la responsabilidad; se trata de padres y madres trabajadoras que perciben, como la mayoría de los trabajadores mexicanos, salarios insuficientes para mantener a sus hijos.

Como responsables de sus hogares, padre y madre trabajan para obtener ingresos suficientes para garantizar alimento, vestido y calzado a sus hijos, en detrimento de tiempo para atenderlos en su formación.
Si la ley señala que los trabajadores deben recibir ingresos suficientes con el salario mínimo general, para alimentación, vestido, vivienda, salud y educación para la familia, y no se cumple con ese precepto constitucional, entonces está obligado a complementar los alimentos del hogar, proporcionándole lo necesario a los alumnos, durante el tiempo que permanezcan en la Escuela, como le hacen con las escuelas públicas en EUA.
Si el padre o la madre por asuntos de trabajo no pueden formar valores y buenos hábitos a sus hijos, corresponde a las escuelas públicas esforzarse metodológicamente, por ayudarlos y encausarlos.

El Estado Mexicano ha estado tratando de informar y formar a los maestros en el trato a los educandos a través de la SEP (Secretaria de Educación Pública) pero a la SEP se le escatiman los recursos suficientes para atender el servicio educativo.

Desde el 2003 se acordó que el 8% del PIB (Producto Interno Bruto), se invirtiera en Educación y hasta la fecha, las legislaturas que aprueban el Presupuesto de Egresos año con año, no han encontrado el método para lograr que el Presupuesto de Ingresos, que debe establecer la recaudación para contar con suficientes recursos para Educación, se aplique.
Sin lugar a dudas el Estado tendrá mayores recursos financieros si graba progresivamente a los que más ganan.

Pero al parecer, se trata de no molestar a las grandes empresas transnacionales. Por algo no se ha elaborado una lista de alimentos procesados por tales empresas y prohibido su consumo en las escuelas, aun y cuando la Secretaria de Salud y Educación Pública denuncien que el problema de la obesidad infantil aumenta, al igual que los problemas de diabetes y cáncer.
Volviendo al tema del “bullying” es indudable que los maestros tenemos fallas, pero el sistema educativo nacional, está obligado a capacitarnos y actualizarnos en los temas educativos, de conocimiento de los adolescentes y el aspecto jurídico que debe regir nuestros actos, ante cualquier circunstancia que se presente en las escuelas.