En la opinión

Pbro Miqueas Cantú Garza

Manifestación de la renovación de la memoria

La vida en familia es fascinante, feliz y firme.
La parábola del hijo pródigo tenía, más allá, de las energías rebosantes, un corazón donde comenzó las inquietudes, las inconformidades y el fastidio.

Cuando el hijo pródigo le solicitó al padre: dame la parte de los bienes que me corresponde, el padre no le mandó a freír espárragos, ni le dio calabazas, ni puras habas, ni lo mando a sumar peras con manzanas.

El padre le repartió sus bienes; el padre no cambió su carácter, ni su actitud, ni mostró otra forma de proceder; en cambio, el ser y la voluntad del padre manifestó optimismo; aceptó la determinación,destino y la mente del hijo, aunque no era correcta.

Cuando la familia no posee mente estable, la memoria se hace más corta .
El hijo quiso aprovechar el éxito del padre para ser independientes, para vivir confirme a sus deseos y derrochar los bienes.

Todos los deseos, planes, proyectos adquieren efectos positivos y negativos por lo tanto en clara reflexión y concreta consideración prudente; observamos todo lo que el hijo pródigo perdió de forma impresionante:

Perdió su familia
perdió a su padre
perdió sus bienes
perdió el hogar
perdió el trabajo
perdió sus recursos
Perdió su tiempo
Perdió su dignidad
perdió su alimentación diaria.

La experiencia de la vida, al que se revela; no le espera un bienestar, sino una rebelión plena del efecto inmediato de la rebelión en su memoria; porque revive lo almacenado.

El hijo pródigo recordó un hogar próspero, difunde y aclara que su padre poseía bienes, era sabio para vivir una vida estable, comprensión y entendimiento humano de manera que hijo exclamó ¡cuantos jornaleros hay en la casa de mi padre tienen abundancia de pan y yo aquí perezco de hambre!
Despertó la memoria, la memoria es categórica . El hijo pródigo afloró el estado económico de su padre comparando el bienestar de los jornaleros con la situación de él.
La memoria es declarativa: mis decisiones me llevaron a la ruina o desgracia.
La memoria toma una decisión determinante: me levantaré e iré a la casa de mi padre
La memoria estable, es un diálogo, una relación, una oración de perdón: padre he pecado contra el cielo y contra ti.

Para vivir en una integración recuperada; tiene que haber fuerza, libertad, voluntad
Y experiencia. Dios tiene poder de restauración en la familia.
Que Dios nos ayude a vivir una vida familiar estable.