Esther Santos Domínguez, es la madre que solapa a su pareja.

Un trato inhumano al mandar a sus hijos a pedir dinero para explotarlos de esa manera es lo que les daba un matrimonio, por lo que fueron detenidos por elementos de la Policía Estatal Acreditable y consignados ante el Ministerio Público de Protección a la Familia.
Los menores fueron enviados al DIF en tanto el licenciado Carlos García, titular de la Procuraduría de la Defensa al Menor y Protección a la Familia, tomo conocimiento de esos hechos para abrir una averiguación sobre ese penoso caso.
Se dio a conocer que la abusiva pareja, fue identificada como Rafael Romero Matías, de 39 años quien no trabaja y no tiene oficio de nada, y su pareja sentimental que le solapa todo con tal que no la deje se llama Esther Santos Domínguez, de 33 años.
Ambos tienen su domicilio en la calle Ferrocarril número 525 de la colonia Centro, en donde fueron detenidos por los oficiales de la Policía Estatal, Francisco Javier Vega Martínez, José Luis González Torres y Erick Adrián Lerma Aguilar.
En su informe a sus superiores, los oficiales señalaron que como a las 21:17 horas del domingo recibieron un llamado de la central, donde les informaban que por el Boulevard Hidalgo, en el exterior del comercio Burger King había dos menores abandonados.
Agregaron que llegaron al punto indicado, y que se encontraron a Juan Carlos Romero Santos, de 11 años así como a Yareli Arabela Romero Santos, de 5 años quienes dijeron que se habían salido de su casa, por lo que los oficiales los llevaron al domicilio donde estaban sus padres y estos le dijeron que sus hijos se les salían de su casa.
Sin embargo los oficiales se toparon a otro menor en el centro comercial Smart, sucursal Anzaldúas ubicado el Boulevard Tiburcio Garza Zamora con Boulevard Morelos, y junto con el estaba José Wilbert Romero Santos, de 10 años quien dijo que sus padres los mandan a pedir dinero para ellos.

Otro menor de 3 años de edad también fue asegurado por lo que fueron trasladados a la base de la PEA, donde el juez calificador de turno, Hugo Ramírez Sierra consigno a los padres explotadores a la Agencia del Ministerio Público de Protección a la Familia.
Mientras que los menores fueron puestos a disposición del Sistema Integral para la Familia a través de la Procuraduría del menor.