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Freddie Highmore, de visita en la ciudad de México

Conocer a Freddie Highmore en la ciudad de México fue un sueño hecho realidad, pero fue un suceso que se acabó más rápido de lo que muchas chicas de hoy hubieran querido.
miércoles, 30 de julio de 2014
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MÉXICO, D.F., julio 30 (EL UNIVERSAL).- Conocer a Freddie Highmore en la ciudad de México fue un sueño hecho realidad, pero fue un suceso que se acabó más rápido de lo que muchas chicas de hoy hubieran querido.

La convocatoria o cita era para las 18:00 horas, mas el evento comenzó mucho antes de la hora indicada dentro de Plaza Universidad.
Alrededor de 600 jovencitas, todas dentro del rango de los 17 a los 21 años de edad, acudieron acompañadas de sus mamás a una tienda de discos y videos del empresario Carlos Slim, precisamente para que Freddie Highmore les firmara un box set con la primera temporada de "Bates Motel" que transmite Universal Channel, misma señal que recientemente estrenó la segunda entrega de la serie en la televisión de paga.

Freddie Highmore interpreta al joven Norman Bates en la mencionada serie, el muchacho encarna a un tipo trastornado que sufre el complejo de Edipo y que también gusta de vestirse como mujer.

Para hacer corta una larga historia, al principio no había gran seguridad en la tienda de discos, sin embargo, las muchachitas comenzaron a organizarse solas como en el primer mundo e hicieron una larga fila.

Fue hasta que llegaron los guardaespaldas resguardando a Freddie Highmore, cuando las mamás de las jovencitas pusieron el desorden e hicieron un alboroto feo.

Con esto demostraron la razón por la cual no se realizan más eventos de este tipo en México.
Como nunca existe una planeación y/o buena organización en este tipo de convocatorias, hubieron algunas señoras conflictivas que recordaron sus épicas batallas cuando se pelean -en sus casas-, por el lavadero.

"Unas señoras se iban a pelear porque una de las chavitas se había metido en la fila. Tampoco faltó la señora que le reclama a otra que ella llegó desde temprano", compartió Karen Campos, una de las cientos de fanáticas del estadounidense, presente en el evento.

Cada una de las chicas tenía un cupón especial, canjeable por la oportunidad de que Freddie Highmore les plasmara su rúbrica en la caja recién comprada, aunque en realidad solamente les puso sus dos iniciales.

Karen relató que su odisea comenzó desde que salió de su casa muy temprano. "Estuve esperando por muy largo rato para conocer a Freddie Highmore.

¡Cuando al fin lo tuve enfrente no me trabé!. Me saludó, me preguntó cómo estaba y hasta me habló por mi nombre.

Por suerte ahora no lo olvidé, cuando me lo preguntó, como regularmente me pasa cuando conozco a alguien que admiro.

Después de nuestro breve intercambio de palabras me dio un beso en los labios y yo fui muy feliz", contó la fiel admiradora.
Los guardias de seguridad no permitieron la toma de fotografías adentro de la tienda, ni tampoco dejaron a las muchachitas sacarse fotos con Freddie o estar más de un minuto con él, por lo mismo, varias personas desde afuera le gritaban a Freddie que querían tomarse la foto de recuerdo.

Cuando estaban casi finalizando la sesión de autógrafos, las chicas emocionadas volvieron a gritar: "Foto con Freddie", "Foto con Freddie", y ya que se marchaba gritaron a coro: "Que lo regresen, que lo regresen".

Freddie Highmore simplemente les dio las gracias a su público y se fue caminando tranquilo, con una sonrisa plena en el rostro.


EL UNIVERSAL

 

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