Joven intenta suicidio porque vecinos exigen agua a su padre

SAN SALVADOR ATENCO, Méx., julio 30 (EL UNIVERSAL).-

Una joven de 20 años subió a la parte alta de un tanque de agua de la colonia Benito Quezada de la comunidad de Nexquipáyac e intentó arrojarse porque los habitantes exigen a su padre, quien es presidente del comité de agua potable, que restituya el suministro en la comunidad porque desde hace varios días no tienen servicio.
La mujer, identificada como Gisel, quiso suicidarse porque dijo estar cansada del hostigamiento de los vecinos hacia su padre, quien desde el 2004 es el encargado de administrar el servicio de agua potable en la comunidad atenquense.
Según los testimonios de los residentes, el presidente del comité local de agua, tiene un adeudo de 18 mil pesos con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), por lo que fue suspendido el suministro desde hace varios días.
Los pobladores juntaron más de 60 mil pesos y se los entregaron al presidente del comité local para que liquidara el adeudo y se restableciera el suministro para más de 3 mil habitantes que dependen de esa fuente de abastecimiento.
Sin embargo, pasaron los días y el servicio no se normalizó, por lo que exigieron al presidente del comité de agua que explicara qué sucedió.
De acuerdo con los vecinos, el encargado de administrar el sistema de agua no se ha presentado a las reuniones a las que se ha convocado, por lo que se acordó designar a un comité interino que ahora encabeza Hortensia Hernández.
Los vecinos insultaban a los familiares del presidente del comité local en la calle o en su domicilio para que regresara el dinero o para que restableciera el suministro.
Los reclamos de la comunidad no los soportó su hija Gisel y la tarde de este miércoles, ascendió al mismo pozo que administra su padre con la idea de lanzarse.
Al lugar acudieron elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y de Bomberos de San Salvador Atenco para tratar de disuadirla de suicidarse.
También, se concentraron más de 300 vecinos que estaban a la expectativa de lo que pudiera suceder.
El novio de Gisel llegó al sitio y se comunicó vía celular con ella para tratar de convencerla de no suicidarse.

Acordaron que él subiría. Al llegar a la cima del tanque la abrazó. Policías estatales y bomberos aprovecharon el momento y ascendieron el pozo.
Cuando estuvieron cerca la aseguraron y la bajaron del tanque.
La subieron a una unidad y la trasladaron a la subprocuraduría de Texcoco.