Claudio X. González, presidente de la organización de Mexicanos Primero. (Foto: Archivo EL UNIVERSAL)

La reforma energética "secuestró" parte de la implementación de la reforma educativa, por lo que "es momento de meter segunda en la aplicación de las reformas estructurales", planteó la organización Mexicanos Primero.

Al hacer pública la instalación de un espectacular en una de las principales vialidades de la ciudad de México, el Abusómetro busca ser un marcador electrónico de lo que a consideración de la organización es la cantidad de dinero que se "desvía o roba del presupuesto educativo en los 298 mil 174 pagos irregulares e ilegales a trabajadores comisionados y aviadores, entre otros".

Al hacer la presentación, en conferencia de prensa Claudio X. González, presidente de la organización de Mexicanos Primero, cuantificó que al año el gobierno gasta 800 mil millones de pesos en materia educativa; uno de cada cinco pesos del presupuesto total.

A decir del dirigente empresarial, esos recursos se gastan de forma "opaca e ineficiente".
Desde hace varios años la organización ha insistido en la necesidad que sean excluidos de la nómina magisterial todos aquellos profesores o trabajadores del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) que reciben un salario y no realizan actividades frente a grupo.

El espectacular colocado en la avenida Periférico rumbo al sur de la ciudad se convertirá en un contador de la cantidad que la organización estima se le paga a los maestros y que incluso contabiliza por segundo, la cantidad de dinero destinada por plaza.

Esa agrupación calculó en 10 mil pesos los salarios promedio de los maestros que reciben de forma irregular un pago.
Claudio X. González, dijo que "si no logramos utilizar el recurso con transparencia o eficiencia se corre el peligro de que no se realice el potencial histórico que tiene la reforma al tercero constitucional para empezar a transformar nuestro sistema educativo".

Consideró que hasta ahora "no se está gastando bien el dinero de manera eficiente y transparente".
Planteó, además que "parte de la implementación de la reforma educativa --en mi opinión-- se vio secuestrada por la reforma energética, porque a como diera lugar la administración quería lograr la reforma energética; y no quería ningún problema con bases sindicales, con cúpulas con maestros".

En el escenario se advierte que el gobierno "no quería acrecentar ningún problema antes de que saliera la reforma energética, bueno pues ya salió la reforma energética... ya lograda la reforma energética es momento de meter segunda en la aplicación de las reforma estructurales".