Descuentos y violencia afectan a distribuidores de autos

MÉXICO, D.F., octubre 22 (EL UNIVERSAL).- Para impulsar la venta de autos nuevos en el mercado mexicano, los distribuidores han tenido que implementar descuentos en detrimento de su margen de ganancia.

Hace 20 años, el margen de ganancia de los distribuidores era de 18% y ahora varía entre 5 y 7%, dependiendo de la marca, dijo Guillermo Prieto, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA)
"Esta reducción de márgenes es adicional a la que ya se ha venido dando por tener una mayor competencia de marcas, hay más de 550 modelos.

Hace 20 años eran solo cinco marcas y el margen era de 18%. El tema es que si el margen baja tenemos que compensarlo con volumen y el problema es que se dé ese volumen porque si sólo se comprime el margen y no incrementa el volumen, la rentabilidad es baja", explicó en el marco del Foro Automotor AMDA 2014.

En el primer semestre del año, los distribuidores vieron una caída en las ventas de vehículos como consecuencia de la entrada en vigor de la reforma fiscal, y fue hasta agosto cuando se mostró un repunte en las ventas.

Para este año se prevé la venta de 1 millón 120 mil unidades, menos de las que se vendían en 2005, con todo y los incentivos aplicados por las marcas, por lo que el mercado interno aún se encuentra rezagado.

El presidente de AMDA subrayó que cada vez es más difícil vender un auto nuevo, debido a modificaciones como la Ley de Lavado de Dinero, que restringió el uso de efectivo para la compra de vehículos; la ley de protección de datos personales; las normas ambientales; la discrecionalidad con la que Profeco realiza las inspecciones; las normas laborales y la cantidad de avisos que le piden a los distribuidores las autoridades federales y estatales; lo que en conjunto incrementa los costos de operación de las agencias.

Adicionalmente, la violencia que se vive en el país pone a los distribuidores en una situación vulnerable.
"Aun cuando mediáticamente pareciera que el problema de la inseguridad ha disminuido, la realidad es otra, y se ha acentuado en muchas ciudades donde se encuentran algunos distribuidores", señaló Treviño.

El presidente de AMDA indicó que tan sólo en el último año, cerraron ocho distribuidoras en Michoacán.
"En Chihuahua hubo muchas extorsiones y estamos en estrecha relación con la Comisión Nacional de Seguridad, Tamaulipas está muy complicado y la gente tampoco está en la mejor disposición de denunciar.

Nos hemos encontrado casos donde hay gente del crimen organizado dentro de las agencias donde están viendo qué modelos tienen, cómo se mueven y no se les puede correr", detalló.

"Ha habido secuestros, sigue habiendo extorsiones, sigue habiendo cuotas de piso y está perfectamente identificado quiénes son", subrayó Treviño.

El líder de los distribuidores también comentó que la relación de las agencias con las plantas armadoras no es pareja, pues, en algunos casos, el cierre de una distribuidora está sujeta a discrecionalidad por parte de las armadoras.

"Al ser una franquicia, el fabricante pone sus condiciones para vender el producto y entonces ese es un tema donde las plantas te piden tantos metros cuadrados para el taller, te piden que cumplas ciertas políticas, tienes que vender sus propias refacciones, se establecen las políticas de comercialización de ventas, pero también tienen la facultad de decidir si un día estás o no estás donde quieren ellos que estés", indicó Treviño.

Como ejemplo, AMDA mencionó el caso de la desaparición de 35 distribuidoras de Nissan hace un par de años, las cuales se cancelaron por decisión de la planta y no todos los contratos se concluyeron en las mejores condiciones.

AMDA resumió que este año las agencias están viendo crecer la facturación por un incremento en el volumen de venta, pero no un crecimiento en sus utilidades.




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