Rogelio Rodríguez Mendoza

Confidencial

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Bendita justicia federal

jueves, 20 de noviembre de 2014
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“Bendito Dios que existe la justicia federal”, es frase recurrente entre abogados postulantes cuando se sienten víctimas de fallos dudosos por parte de los órganos jurisdiccionales locales, o bien cuando se ven impotentes frente a los excesos de los poderes públicos o de cualquier autoridad.
Para los litigantes, y en general para muchos justiciables, los tribunales federales son algo así como la luz al final del túnel o la tablita de salvación para un náufrago.
Dotados de una enorme confianza social, los juzgadores locales son la última esperanza de encontrar justicia para quienes se sienten víctimas de la ausencia de autonomía, de la corrupción, o de la “línea” bajo la que operan muchos jueces.
Pues bien, es esa misma justicia federal la que tiene en sus manos el estudio, análisis y resolución de un juicio de amparo promovido por el Doctor en Derecho, Rafael Torres Hinojosa.
El jurista acudió desde la semana pasada ante los tribunales federales para dolerse de una serie de violaciones de derechos en su perjuicio, luego de que el Consejo Técnico de la Unidad Académica de Derecho y Ciencias Sociales de la UAT, le negó el registro para contender por la dirección del plantel.
Más allá de las opiniones de prestigiados expertos en Derecho, que consideran que no habrá problemas para que el Juzgador que resuelva el amparo, invalide la elección y ordene una nueva para que el quejoso pueda competir, creo que lo verdaderamente interesante será saber el criterio que emite el tribunal de amparo.
Cualquiera que sea la resolución, la justicia federal estará bajo la lupa de miles de victorenses y tamaulipecos en general, que querrán conocer los razonamientos bajo los que se sustentará la sentencia a emitirse, ya sea a favor o en contra del quejoso.
Es decir, independientemente del sentido de la resolución, lo que verdaderamente será digno del escrutinio público, son los argumentos de quien resuelva el amparo, en éste caso el Juez Primero de Distrito del Décimo Noveno Circuito del Poder Judicial Federal.
Como ya se dijo al inicio, la justicia federal es todavía alternativa de confianza para quienes se sienten víctimas de las injusticias de las instancias locales, por lo cual esperemos que esa confianza en los tribunales federales siga prevaleciendo siempre, porque el día en que se pierda podría ser bastante peligroso para una sociedad como la nuestra desconfiada por completo de sus instituciones.
Vale la reiteración: éste espacio no aboga ni da por sentado algún sentido de la sentencia.

Sí espera, en cambio, que la resolución este plagada de una objetividad e imparcialidad, que no deje la mínima sospecha a una intromisión de esas mismas instancias contra las que Torres Hinojosa se está doliendo.
Sería una incongruencia , como ya se ha dicho con insistencia, que en una institución donde se enseña Derecho, se pisoteen los derechos de sus alumnos y catedráticos.
Pero más grave aún sería que, desde los tribunales encargados de impartir justicia, se avalen esos excesos.
EL RESTO.
El Presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, Ramiro Ramos Salinas, destacó la importancia que tendrá para los burócratas estatales, la nueva Ley del Instituto de Previsión y Seguridad Social del Estado de Tamaulipas, promovida por el Ejecutivo y recibida éste miércoles por el Pleno Legislativo.
“Es una ley que garantiza el pago de pensiones y jubilaciones al menos hasta el 2025” detalló.
Pero además resaltó el hecho de que la ley será revisada y evaluada al menos dos veces en cada sexenio.
ASI ANDAN LAS COSAS.
roger_rogelio@hotmail.com

 

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