Héctor Miguel Chávez

Noticiero...

H. MATAMOROS, Tam.- Este lunes se llevó a cabo en Tampico una manifestación de enfermeras protestando por una supuesta reforma a la Ley de Salud que podría bajarlas de categoría y de sueldo.
Otra vez las redes sociales fueron utilizadas para provocar desorientación entre las enfermeras y enfermeros del país.
Y esa inquietud ya rindió sus primeros frutos en Tamaulipas.

En Tampico ya hubo una manifestación y en el resto de las ciudades del estado están anunciando otras.
Lo que se sabe oficialmente de este asunto es que desde hace varios años el gobierno federal estableció dos categorías en el trabajo de la enfermería.
Unas son auxiliares, licenciadas en enfermería y licenciadas con especialidad.
Las auxiliares son aquellas personas que saliendo de la secundaria entraron a estudiar la carrera de enfermería y por tal razón perciben un sueldo en el sector salud de unos 4 mil pesos mensuales.
Las que tienen licenciatura en enfermería son aquellas que estudiaron secundaria, preparatoria y la licenciatura completa, y su sueldo es muy superior y tienen categoría de licenciadas en enfermería.
Y las especializadas son aquellas que terminaron la licenciatura y luego hicieron una especialidad, y esas tienen un salario superior.
Todas las escuelas de enfermería del país ya no reciben estudiantes solamente con estudios secundarios.

Tienen que haber terminado la preparatoria y al concluir reciben su título de licenciadas.
Muchas auxiliares de enfermería han estudiado la preparatoria y en algunos casos, según la práctica que ya tienen, les revalidan materias y hacen la licenciatura en poco tiempo.
En el Sector Salud la regla es desde hace ya algunos años, pagar los salarios según los estudios de cada uno.

Claro que las hay con especialidades y esas ganan mucho más.
Las puertas están abiertas en todas las escuelas de enfermería para que las enfermeras auxiliares hagan su licenciatura.
Eso es lo que hay de oficial.

Falta que los que protesten informen más claramente de qué iniciativa se trata, cuándo se presentó y cuál es el texto, porque lo que se maneja en las redes es muy general y provoca descontento.
El país no está para manejar rumores desestabilizadores, ya sea por mala fe o por diversión, por eso si es preciso que la información sea muy concreta.
Pues ya ve usted, hay quienes ven la tempestad y no se hincan.

El horno no está para bollos.
A PROPÓSITO DE DESCONTENTO
Los usuarios de la banca comercial están inconformes con el servicio.
Si usted ha observado, en lo últimos años los bancos han cerrado sucursales y disminuido su personal en las cajas.
Pese a esa disminución de espacios y personal, los bancos han asumido contratos para pagar nóminas, para pagar becas y esto ha provocado el caos y la inconformidad de la gente.
En los días y las horas pico, en la mayoría de los bancos registran aglomeraciones en sus operaciones normales porque sus ventanillas nunca tienen suficiente personal.

Hay bancos que tienen 12 y 15 cajas pero nada más dos o tres cajeras y si se llega la hora de la comida, pues nada más queda una y no hay quien las sustituya.
Hay que hacer notar que no todos los bancos son así, pero sí la mayoría, sobre todo los que tienen más contratos de nóminas y becas.
Los días de quincena tardan hasta una hora las filas para hacer uso de los cajeros, porque los cajeros automáticos tampoco son suficientes y tienen que cobrar preferentemente en la institución a la que corresponde la tarjeta, porque de hacerlo en otra diferente, las comisiones son muy altas, van de los 20 a los 36 pesos por operación.
Los usuarios indignados leen con frecuencia los miles de millones de pesos de utilidades que reciben los bancos y que por supuesto se van a España, Inglaterra, Hong Kong, y se preguntan, con todas esas enormes utilidades ¿qué más hace falta para abrir más espacios, más personal, más cajeros?.
Y otra cosa más, hay bancos que son auténticos negreros que tienen turnos larguísimos para su personal y salarios y prestaciones mínimas.
Es un personal sobreexplotado, como si estuviesen sin protección legal.
Las preguntas son: ¿A qué autoridad le corresponde poner remedio a este asunto?
¿O es que acaso hay algún apartado especial de impunidad para los dueños de la banca mundial?
¿Cómo se le puede llamar a una institución que ofrece y vende servicios y no cumple?
Y las empresas y los gobiernos que los contratan ¿pueden revisar ese asunto y exigir un servicio más eficiente?
Y a los usuarios ¿quién puede representarlos?, ¿los sindicatos, los líderes sindicales, los senadores?
¿Y la Condusef está pintada?