En entrevista con EL UNIVERSAL, el legislador morelense narró que sus secuestradores le dijeron: “Independientemente de que consigamos el dinero o no, tú no nos convienes vivo, así es que te vamos a matar, y te vamos a entregar destazado, porque ni tú ni todos ustedes nos convienen vivos”.
Martínez dijo que cuando escuchó eso, mentalmente se despidió de su familia. Reveló que en las conversaciones entre sus plagiarios no se hizo referencia a los “Guerreros Unidos”.
Sin embargo, éstos insistieron en vincularlo con la banda antagónica Los Rojos —que operan principalmente en Morelos y Guerrero—; al negar que tuviera un nexo con dicho grupo del crimen organizado lo golpearon en el rostro.
El legislador perredista relató la forma en que lo sorprendieron afuera de su casa con el pretexto de que una persona le haría una petición; no obstante, desenfundaron sus armas y se lo llevaron.
En ese momento iba acompañado de su hija, quien logró escapar del lugar.
Martínez Martínez fue liberado en un operativo efectuado por fuerzas federales y estatales la madrugada del jueves, quienes ubicaron la casa de seguridad del grupo criminal y detuvieron a ocho presuntos integrantes de “Guerreros Unidos” por estos hechos.