Rafael Díez Piñeyro

6 de Julio de 1997

Partidos ricos, pueblo pobre

Indignante actitud del Poder Legislativo Federal al aprobar y autorizar un presupuesto de 32 mil millones de pesos al INE (Instituto Nacional Electoral), para su manutención y para llevar a cabo el próximo proceso electoral.
Para renovar la Cámara de Diputados (500 especímenes de dudosos antecedentes, a los cuales habrá que mantener los próximos tres años) 7 gubernaturas con sus respectivos Congresos locales y sus correspondientes alcaldías, el pueblo de México habrá de a pagar la insultante cantidad de ¡32 mil millones de pesos!
Sólo para cada uno de los candidatos a Diputados Federales se les autorizó un tope (¿?) de campaña de 1 millón 209 mil pesos.

Actualmente existen registrados 10 partidos políticos con derecho a contender el próximo junio, pero aceptemos sin conceder que por alianzas, amiguismos y oscuros intereses solo se registran 5 candidatos de los 10 partidos políticos.
Ahora bien, si multiplicamos los 5 candidatos para ocupar 500 curules en el Congreso Federal nos arroja un costo de 3 mil millones de pesos aproximadamente, solo para la elección de Diputados Federales, a lo anterior habrá de agregar las elecciones en 7 entidades con su carga correspondiente de diputados locales y presidentes municipales.
Cualquier jovencito estudiante de secundaria diría que es demasiado caro mantener a ese tipo de los mal llamados representantes populares.

Pero no creas Lectora-Lector que solo los candidatos a puestos de elección popular son una pesadilla económica para el pueblo.
También, habrá de cargarle el insultante costo económico de pomposamente llamado ahora Instituto Nacional Electoral, cuyos Consejeros y burocracia electoral federal y estatal quienes reciben sueldos, gastos y apoyos que ofenden a un pueblo pobre.
Bastaría con informarle Lectora-Lector que los sueldos de esta burocracia electoral son mayores a lo que ganan los Ministros de la Suprema Corte de justicia de la Nación y mire Usted que nuestros Ministros son de lo mejor pagados en el mundo, con el agregado que cuando en el INE no se pongan de acuerdo, por defender sus intereses partidistas, ya que ellos representan los intereses de sus partidos y nunca aspiran a coadyuvar con la democracia, entonces la autoridad judicial intervendrá y dictará la sentencia definitiva.
De ahí, Juan Pueblo se pregunta alarmado, ¿si tener Gobernadores, Alcaldes, Senadores, Diputados Federales y Locales, con tan pobres resultados, habrá otra opción más barata y efectiva?
¡Claro que sí! Responden los jóvenes estudiantes universitarios, esa juventud demandante y preocupada por el futuro de México, juventud que por estar mejor preparada y capacitada, exige a la clase gobernante transparencia en la rendición de cuentas, honestidad y probidad en el desempeño de sus cargos públicos y resultados que beneficien al pueblo que le paga sus salarios, pero no los autorizan a la tranza, al conflicto de intereses, favoritismo en la adjudicación de obra pública, basta de impunidad y corrupción.
La otra demanda juvenil es que si en realidad existe la vocación social de los partidos políticos, y de sus representantes, pues que se financien y mantengan con los recursos de sus miembros y simpatizantes, que nunca más reciban dinero del pueblo a través del gobierno, entonces y solo entonces podremos decir que México avanza hacia la democracia.

Pero mientras vivan de manera parasitaria solo tendremos políticos y gobernantes mediocres, cínicos y sinvergüenzas.