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Por: Francisco Martínez Lugo
CD. RIO BRAVO, TAM.- Al no garantizar certidumbre jurídica a su patrimonio de lotes donde viven la mayoría de familias de la Invasión Estelita Anzaldúa, un grupo de habitantes acudieron a Palacio Municipal y solicitan asesoría jurídica a fin de entablar demanda formal contra el supuesto dueño del predio a fin de que les otorgue carta de posesión o documento que acredite la propiedad y puedan realizar gestiones para la introducción de energía eléctrica.
Fue la mañana de este pasado lunes un grupo aproximado de unas 20 personas del asentamiento Invasión Estelita Anzaldúa se dieron cita a Palacio y llegaron hasta secretaría particular a fin de plantearle la problemática a las autoridades del Ayuntamiento.
Al frente iba la señora Guadalupe Sánchez, Presidenta del Comité de Desarrollo Social de dicha colonia, la cual al igual que el grupo de personas manifestaron su inquietud de no avanzar en las gestiones para la electrificación, dado que carecen de un documento que acredite la propiedad del terreno que poseen.
Para ello, dicen requieren de un plano oficial, tener una carta de posesión o algún otro documento que justifique la propiedad, y no lo tienen en virtud de que el supuesto dueño de nombre Oscar Luna Mireles les otorga un recibo de pago que especifica como si fuera contrato de arrendamiento.
Demandaron se cite a comparecer al supuesto dueño del predio ante la autoridad correspondiente, a fin de que les otorgue un documento que realmente acredite la propiedad del terreno y no quiera confundirles con darle un documento de arrendamiento como si fuera recibo de pago cada que le dan el abono.
Incluso denunciaron a varias familias del asentamiento que de tiempo atrás adquirieron un terreno con poquito y se atrasan en el pago, les despoja del lote y lo revende más delante a otra persona.
Cabe mencionar, refieren en un principio el costo de cada lote se estableció de 35 mil pesos y de un tiempo en adelante a la fecha ahora se incrementó su costo a unos 75 mil pesos, aún cuando el supuesto dueño ni siquiera se comprometió con la introducción de servicios de agua y drenaje, pues gracias al Gobierno del Estado aterrizaron estos dos servicios elementales.