Damián Dueñez Rodríguez, ex trabajador de la tienda departamental, conocedor del movimiento y detenido por tentativa de robo al establecimiento.

Ex trabajador de conocida tienda departamental en esta ciudad, fue detenido por la Policía Estatal Acreditable, dentro de la misma con dos maletas cuyo contenido eran los productos que pretendía sustraer, conociendo el movimiento perfectamente porque este sujeto ya había laborado en el lugar.
Damián Dueñez Rodríguez, de 23 años de edad con domicilio en la calle Agustín Melgar No.- 111 de la colonia Octavio Silva, mismo que fue aprehendido infraganti y con los productos que pretendía robar del interior del establecimiento, dando la voz de alarma el gerente de la tienda, al ser informado que, la alarma de movimiento se había activado.
El señor Alejandro Castillo Rodríguez, gerente de la tienda, se entrevistó con el teniente Demetrio del Ángel Flores y dio aviso que de la central de alarma, recibió una llamada, informándole que, las alarmas de movimiento y de impacto se habían activado, siendo al filo de las 03:30 horas y llegando ante la PEA, al filo de las 04:15.
Procediendo a salir varias unidades de la PEA, siendo abierta la tienda y en cuyo interior se detuvo al presunto responsable del robo, mismo que portaba tres maletas y en su interior varios artículos de los que exponen ahí para su venta, consistentes en ropa, zapatos, perfumería y otra maleta con herramientas, consistentes en dos martillos, una lima, un soplete portátil.
En una maleta portaba cuarenta y dos perfumes de hombre y de mujer, desodorantes, calcetines, gel para el pelo, en la otra maleta llevaba, bóxer de distintas tallas, varias playeras de marca, pantalones de mezclilla, un par de botas y zapatos, varios champuses, varios enseres de cosméticos, propios de mujer, siendo detenido dentro de la tienda departamental y trasladado a las celdas de la preventiva para su consignación.
Narra el presunto que desde un día anterior se había escondido en el estacionamiento, al filo de las 19:30 horas y ahí se esperó hasta que cerraron el establecimiento, sabedor de los movimientos que se hacen en ese lugar, se esperó hasta las horas de la madrugada, para poder introducirse al interior de la tienda y tratar de perpetrar el robo.