Obispo convoca al voto durante marcha por la paz en Cuernavaca

CUERNAVACA, Mor., mayo 23 (EL UNIVERSAL).- El obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, encabezó la Marcha por la Paz de esta ciudad y convocó a la sociedad a ejercer su derecho al voto pero también le pidió conocer a los candidatos y sus propuestas.

Precisó que recibir un regalo de los partidos políticos no obliga a nada, el voto es libre y secreto. "Sé honesto, un voto corrupto traerá un gobierno corrupto", puntualizó.

A 16 días de las elecciones, Castro se pronunció en contra del voto nulo y después exhortó a los manifestantes a revisar trayectoria y plataforma política de los aspirantes electorales, porque -dijo- los candidatos profesan las ideologías de sus partidos, "algunos incluso que atentan contra la vida", señaló el prelado en clara referencia al PRD y su aliado el PT que proponen despenalizar el aborto.

"El 7 de junio tenemos la oportunidad de ejercer un derecho y una obligación que puede mejorar los problemas sociales que padecemos. Conozcamos bien a cada partido y sus ideologías, a cada candidato y sus propuestas.

¿Tienen principios? ¿Los sostienen? ¿Garantizan que trabajarán por la recomposición de un tejido social en un estado dañado por la violencia, la corrupción, la impunidad, el narcotráfico y la pobreza? ¿Respetarán la vida desde su concepción, fortalecerán la familia?", cuestionó frente a los ciudadanos que caminaron desde la iglesia de El Calvario hacia la catedral de Cuernavaca, situados a una distancia menor a los 500 metros en el centro.

A la marcha acudieron grupos eclesiales, organizaciones civiles, políticos y candidatos a la alcaldía de Cuernavaca como Cuauhtémoc Blanco Bravo, del Partido Socialdemócrata de Morelos; Luis Miguel Romero Ramírez, del Acción Nacional; Alejandro Villarreal Gasca, del Movimiento Ciudadano y Maricela Velázquez Sánchez, del PRI.

La mayoría vistió de blanco y coincidió en la demanda de paz en territorio morelense.
Frente a ellos, el obispo afirmó que la ciudadanía ya no quiere “pan y circo”, "tiene sed de justicia", sostuvo.

Velázquez Sánchez declaró que "éste es un llamado a la paz y a tomar en lo inmediato acciones que lleven a alcanzar los niveles de tranquilidad que aspiran los morelenses".

El obispo consideró que el clima de violencia no debe soslayarse y por tanto criticó a quienes "se lavan las manos para continuar con su vida cómoda, otros están prisioneros de la problemática y proyectan en las instituciones las propias confusiones e insatisfacciones".

La actitud más adecuada -abundó-, es situarse ante al conflicto, aceptarlo, resolverlo y transformarlo en un nuevo proceso.
Subrayó lo peligroso que es vivir en el reino de la sola palabra, de totalitarismos, en los proyectos más formales que reales, en un intelectualismo sin sabiduría.

Castro Castro pidió a los familiares de las víctimas a impedir que su enojo, frustración, y desconfianza en las instituciones que deberían impartir justicia, se convierta en una tentación para hacerse justicia por mano propia.

"Perdonen tanto a los criminales como las autoridades. La violencia engendra violencia", externó.