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Fue asesinato

Lo que parecía un ahogado por las aguas del canal Rodhe, se convirtió en homicidio.
Una deuda fue el móvil del homicidio. La labor de los elementos de Técnicas Forenses de Servicios Periciales, fue factor importante para el esclarecimiento del caso
domingo, 24 de mayo de 2015
Por: LA PRENSA / Reporte
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La experiencia de los peritos de técnicas forenses de Servicios Periciales, descubrió la coartada del asesino del infortunado sujeto encontrado “ahogado” en el canal Rodhe el pasado viernes cerca de la Quinta Blayser, así lo informaron en la Procuraduría General de Justicia.
De esta manera, la investigación sobre la muerte de Ricardo Ramos Jiménez, de 25 años, se aceleró cuando el médico forense encontró golpes y heridas por arma blanca, lesiones que le causaron la muerte por shock hipovolémico,
La familia de la víctima advirtió en medio de su dolor, que el miércoles por la tarde había salido con Magdiel Porfirio Lagunes Santander, de 27 años, al que suponían su amigo, quien es cristiano, de acuerdo a lo declarado por su familia y en su primer interrogatorio por parte de la policía, todo lo evadió.
Sin embargo admitió haber estado con su “amigo” en Plaza Sendero y de ahí a HEB Plaza Real y no supo más de él ese día 20 mayo, entre otros detalles que dijo al fiscal segundo Jesús Treviño Vega; en esos momentos quedó fuera de sospecha.
Sin embargo, cuando cuestionaron a los padres de Lagunes Santander, refirieron que Magdiel estuvo temprano en casa e incluso estuvo lavando su automóvil compacto por fuera y por dentro por largo tiempo.
En ese momento surgió la experiencia de los peritos en Criminalística a cargo de Pedro Sosa López, pues no era común que el sospechoso limpiara su auto en casa y menos por largo tiempo.
Magdiel era el último contacto en vida con la víctima, solicitando los investigadores científicos al fiscal segundo, autorizar el vehículo como materia de análisis a pesar de las dudas; los peritos químicos practicaron la prueba del luminol, un reactivo sensible al hierro componente principal en la sangre, para ello debe estar en completa oscuridad y con luz negra, sonde se registra la reacción positiva tal como lo fue.
Explicaron que pueden pasar años pero si hubo rastro hemático brillará, sea sangre humana o animal, una vez localizada realizan la prueba de Meyer para determinar su especie y en este caso era de Ramos Jiménez.
Con esta evidencia, Magdiel Porfirio Lagunes no pudo sostener su mentira, relató que Ricardo le debía nueve mil pesos y quedaban pendientes dos mil, el miércoles se encontraron para saldar la deuda pero como no le pagó primero pelearon dentro del vehículo, señalando que Ramos Jiménez llevaba el cinturón de seguridad puesto y así lo apuñaló.

 

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