Partir del Punto Zero en la escena rock mexicana

MÉXICO, D.F., agosto 21 (EL UNIVERSAL).- Punto zero es la afinación perfecta de un instrumento de cuerda y la energía en su punto más básico.

Esa idea de Carlos Castro, el vocalista, fue aceptada para nombrar a este cuarteto de pop rock que pretende ganarse un lugar en la escena nacional.
A pesar de su juventud (Armando Sandoval, guitarrista soporte y el más “veterano", tiene 23 años), ya tocan material propio que está disponible en sus redes sociales.

Canciones como “Encuentro casual”, “Mi Valentina” y “La última vez” son pequeñas piezas de un rompecabezas que toma forma.

Los otros miembros de la banda: Ricardo Iglesias (batería), Alí Antonio (guitarra principal) y Carlos, apenas tienen 19 años.
A su edad, Los Beatles ya habían aterrizado en Hamburgo para empezar a escribir una leyenda, pero Punto Zero no los cuenta entre sus influencias, tampoco a otras bandas consideradas clásicas.

Ellos citan a Reynolds, Los Claxons, Bruno Mars y Muse, más del gusto de los jóvenes “millennials”, entre sus artistas preferidos.

En el escenario son una extraña mezcla entre One Direction y Los Bunkers, combinan potentes solos de guitarra con voces melódicas, mezclilla, trajes entallados y corbatines.

"Tocamos pop rock (en español), más que nada. Buscamos un estilo moderno, salirnos de lo que se ha escuchado. Nos ayuda que tenemos varias influencias y ya no sonamos tan burdos, tan básicos", afirman en entrevista.

Se formaron en mayo de 2014, luego de conocerse en el Sindicato de Músicos. Hubo química, dicen. Entonces tocar dejó de ser un simple pasatiempo.

“Ya es un trabajo, hay normas, responsabilidades y metas que cumplir a la semana”, explica Armando. “Cada uno cursa una carrera aparte con qué defenderse y Alí estudia música.

Ese sería el plan 'B', pero el plan 'A' y por el cual apostamos todo, es la música".

Entre la arrogancia y la autoestima
Punto Zero es invitado frecuente a pequeños festivales y eventos universitarios.

En proceso se encuentra un primer EP y a fin de año tiene previsto sacar su álbum debut.
Antes, en octubre, el grupo asistirá al estreno del documental "Artífice: el arte de morirse”, en la Cineteca Nacional, gracias a que colaboraron en el soundtrack con el tema "Mi propio infierno", que actualmente promueven.

Buenas noticias para no contar con el apoyo de un sello discográfico, un objetivo a mediano plazo. "Creo que a la escena musical independiente le hace falta mucho y queremos explotar ese lado, posteriormente una disquera y así amarrar más fuerte.

Queremos empezar desde abajo, que vean que no somos una banda plástica", menciona Carlos.
- ¿Les gustaría ser los próximos Zoé, Panda, Jumbo...?
- Nos gustan esos grupos, sin embargo queremos llegar más allá.

Es muy atrevido decirlo, pero creo que sí se puede. Seremos los próximos “Punto Zero”-concluye Ricardo, el baterista.