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Por: Agencia AP
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En declaraciones en un "town hall", una suerte de asamblea popular para escuchar y responder a las inquietudes de los vecinos, Obama afirmó que no rescató a los bancos por compasión a Wall Street sino porque de no haberlo hecho habría puesto en peligro los ahorros y esperanzas de millones de estadounidenses.
El presidente dijo estar empeñado en recibir "hasta el último centavo" del dinero de los contribuyentes utilizado para rescatar los bancos.
Agregó que los líderes demócratas en el Congreso, como el senador de Nevada Harry Reid, se asegurarán de que así sea.
Pese a su posición como líder de la mayoría en el Senado, Reid enfrenta una encarnizada competencia en noviembre.
Obama dijo que Washington no puede desperdiciar la oportunidad de reformar el sistema de salud de la nación.
En un discurso a la asamblea en Nevada, Obama justificó los proyectos demócratas aprobados en el congreso y sostuvo que las tribulaciones económicas de la nación requieren acción inmediata.
El presidente habló días antes de su cumbre bipartidista sobre la salud, fijada para el jueves. Dijo que aguardaba la propuesta republicana para lidiar con el número creciente de personas sin seguro de salud y los costos médicos crecientes y los desafió a ponerla en el tapete.
Admitió que su puja de un año por reformar el sistema le ha costado capital político tanto a él como Reid, que lo acompañó en la asamblea.
El presidente interviene en la campaña política cuando el control del Senado por los demócratas parece peligrar tras la pérdida de una banca crucial ante los republicanos el mes pasado.
La marea a favor del cambio y el sentimiento generalizado contra Washington que llevaron a Obama al poder hace poco más de un año amenazan ahora con volverse contra su propio partido en las elecciones de noviembre.
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