En la opinión

Pbro Miqueas Cantú Garza

Máxima promesa de Dios Año 2016

La promesa exige fe en Dios que produce una conciencia estable de devoción espontanea, activa, esforzada, experimental y reflexiva, el matrimonio no se casa para ser bisagra sino para avanzar en la fe cristiana, para responder en la perspectiva múltiple motivados por Dios, poniendo en marcha la armonía de comprender la promesa de Dios que se clava en la mente y corazón, la promesa determinante y generosa que no es un sueño o fantasía sino realidad, la promesa exige devoción, gratitud y voluntad, exige confianza en Dios, saber cumplir a Dios en vivencia activa y experimental dando significado, viviendo una conciencia de si, de ética o moral, conciencia propia, la vida matrimonial es una sola carne que es una palabra representativa, es un solo carro, una sola casa, un solo comedor y una sola televisión.

Hace tiempo le dije a una pareja que si el tiempo que utilizan en pelear y gastar lo que no tienen lo utilizaran en ustedes y en su familia, fueran mas prósperos; Tomaron una decisión voluntaria, una decisión planificada, trabajar en armonía y en actitud de fe, inteligencia, clave para mejorar , para adaptar un mejor estilo de vida, la prosperidad no es ir al cajero automático, saber que si no se trabaja no se hace un proyecto razonable el dinero no es el único recurso que poseemos, Dios da confianza , autoestima, relaciones humanas valores, superación e incentiva al cambio, actitud que da bendición en el esposo o la esposa, la promesa de Dios se afianza en el amor.
En el libro de Jorge Bucay menciona, “llegar a la cima y seguir subiendo”; un día le preguntaron a un padre que a cuál de sus hijos quería mas, después de pensar bien confeso, al que más quiero es al que más me necesita, cuando un hijo está enfermo ese es el que más quiero, cuando un hijo tiene problemas ese es el que más quiero, cuando un hijo tiene un revés económico, ese es el que más quiero; cuando un hijo sufre una decepción amorosa ese es el más quiero.
El amor a la familia no es por selección debe girar para satisfacer necesidades, sobre todo hay que confiar en Dios prosperar.