Extraoficialmente se dijo que las víctimas estaban degolladas y tenían las manos sujetas por la espalda con cinchos de plástico.

Nuevo León fue sacudido ayer con una nueva masacre, que extraoficialmente se atribuyó al crimen organizado.
Nueve hombres fueron encontrados ejecutados en una casa de la Colonia Valle San Miguel, en Apodaca --en la zona metropolitana de Monterrey--, en un fraccionamiento privado con cámaras de seguridad.

De acuerdo con el Procurador estatal Roberto Flores, dos víctimas murieron degolladas y los otros siete ahorcados. Todos fueron encontrados atados de manos con cinchos de plástico.
Aunque hasta anoche era desconocido el momento exacto en que ocurrió el multihomicidio, Flores dijo que el reporte fue recibido por la Policía de Apodaca a las 0:45 horas de ayer.
La colonia es privada, pero el personal que regula la entrada se retiró desde las 15:30 del sábado, precisó el Procurador en la rueda de prensa en la que estuvo acompañado por el Gobernador Jaime Rodríguez.
"El Bronco" aseguró que los nueve hombres se habían reunido para consumir drogas y que la investigación arroja indicios que hacen pensar que la masacre no fue cometida por el narco.
Sin embargo, fuentes policiacas indicaron que los ejecutados serían integrantes del llamado Cártel del Noreste, que estaría formado por ex zetas.