Alíber López

Optica Política

Muy asertiva la presentación de Jesús Roberto ante los medios. Aunque se manifestó satisfecho con los recorridos y reuniones que ha realizado en los casi 50 días de campaña, expresó también su preocupación por el lamentable estado en que se encuentra la ciudad y el área rural que conforman el municipio.
Rescatar a Matamoros de las montañas de basura que diariamente se acumulan, de la huida de comerciantes del primer cuadro de la ciudad, de la inseguridad, de los baches que nos invaden, como garrapatas que por cierto ya están haciendo mucho daño a la salud pública, no será fácil, dice Guerra Velasco, pero si se puede hacer mucho si se tiene voluntad política para hacerlo y si se aplican eficientemente los recursos del municipio.

Sabe que “los buenos candidatos se calan en las aguas duras y no en las aguas tranquilas”; él quiere a Matamoros y dará muestras, (ya las está dando), de que se aplicará en resolver la problemática municipal.

Se compromete Jesús a realizar todas las acciones necesarias para rescatar la buena imagen de Matamoros para atraer al turismo, combatir con método la inseguridad en el municipio, mediante estrategias aplicables para garantizar que la lucha contra la impunidad de la delincuencia organizada, sea acertada.
Se ha comprometido ya, a impulsar los valores artísticos locales respecto de los foráneos, aunque en su cierre de campaña que será el domingo 22 de mayo en los espacios del Club América, como el conjunto que encabeza “Juan Villarreal” de Reynosa le ofreció acudir gratuitamente a su Cierre de Campaña, pues así será, aunque también le acompañarán los Grupos “Bagdad”, “Alegría de Corazón”, “Cariño” y “Los Poetas Locos”, a quienes les reconoce su maestría en la interpretación musical.
Nos llamó la atención la información de que, aún siendo él, como Presidente Municipal, el gestor de importantes espacio para el municipio en la Playa Bagdad, en aquel entonces, “Washington”, al deslindarse de lo federal, no se hubiera adjudicado ningún espacio, ni terreno.

Agradeció sin embargo, la donación que un hijo de un amigo de su padre Jesús Roberto Guerra Cárdenas, le hiciera, muchos años después, de un terreno en la playa, y se comprometió a construir ahí, una estancia de descanso de “primera”, en donde los trabajadores del Ayuntamiento y los periodistas, se puedan instalar gratuitamente.
Ya ha prometido donar su residencia para convertirla en Museo, y en cobrar sólo un peso de sueldo como Presidente Municipal, amén de otras promesas que no dudamos que cumpla; ahora que nos habla de una estancia de primera en la Playa Bagdad, nos ha convencido de que los “mecenas” si existen en estos tiempos, y seguramente que los periodistas, le recordaremos sus promesas.