Rechaza policía peruana hallazgo de cadáver de montañista

SAN JOSÉ, Costa Rica., julio 21 (EL UNIVERSAL).- El brigadier peruano Willy Encinas Paca, del Departamento de Policía de Alta Montaña de Perú, informó este mediodía de jueves que las versiones de que campesinos de ese país localizaron los cadáveres de uno de los montañistas mexicanos y de uno los guías locales desaparecidos desde el martes en la zona del nevado de Huascarán, en la sierra norcentral peruana, son “simples rumores y no son versiones oficiales”.
En una conversación telefónica con EL UNIVERSAL desde la base de Caraz, en el departamento (estado) de Ancash, al noroccidente de Lima, el brigadier Encinas insistió en aclarar que “en las últimas horas han estado corriendo muchos rumores y versiones pero no hay nada oficial”.
“No hemos encontrado nada todavía”, recalcó, mientras la incertidumbre cunde en el nevado a la espera de noticias sobre el resultado de un operativo lanzado hoy jueves en la madrugada por una patrulla de la Policía de Alta Montaña y de la Asociación de Guías de Montaña (AGM) para rescatar a dos montañistas mexicanos y a sus dos guías locales, arrastrados el martes anterior por una avalancha en ese sector.
Los desaparecidos son los montañistas mexicanos, identificados por la AGM como José Miguel Mendoza Paulín, de 44 años, y Carlos Guido Blekosky Rascon, de 45, y sus dos guías peruanos, Julio Suárez Rey y Gilberto Loli.

El montañista mexicano Rubén Jaen Cataño se salvó del percance porque se quedó en un refugio en la parte baja del nevado.
El periódico “El Comercio”, de Lima, informó este jueves un corresponsal de televisión desde Huaraz, capital de Ancash, reportó que un montañista mexicano y de un guía peruano murieron cuando escalaban el nevado Huascarán por la ruta más peligrosa y que sus cuerpos fueron descubiertos por campesinos que alertaron del hallazgo a la AGM.
EL UNIVERSAL ha intentado infructuosamente de comunicarse con el peruano Rafael Figueroa, presidente de AGM, para preguntarle sobre la versión difundida por el corresponsal de televisión desde Huaraz.
En una conversación telefónica previa hoy en las primeras horas de la mañana desde Huaraz, Figueroa aseguró a este periódico que “seguimos sin saber nada”.
“He estado tratando de comunicarme con la patrulla, pero parece que está sin señal”, contó.
En otra consulta también en horas de la mañana, el peruano Carlos González, técnico de la Policía, aseguró a EL UNIVERSAL desde la misma base de Caraz que “todavía no tenemos ninguna noticia sobre el rescate”.
Pese a la zozobra, González y Figueroa, que están atentos al desarrollo del rescate, eludieron afirmar si hay o no muertos por el accidente, ya que se carece de información oficial y exacta al respecto suministrada por alguna persona que haya visto o tenido contacto con los cuatro.

Ambos dijeron que están a la espera de recibir los primeros informes certeros.
El peruano Pavel Orellana, otro técnico de la Policía, relató anoche a este rotativo que se ignora por completo el estado de los mexicanos y de los guías, “porque hasta el momento nadie ha podido ingresar a la zona donde se cree que están, ya que siguen cayendo bloques de hielo”.
El trabajo es riesgoso, porque “la patrulla debe escarbar entre la nieve y eso es muy peligroso”, advirtió.

La labor de rescate, narró, se hace de madrugada porque “a esas horas hay temperaturas más bajas y menos probabilidades de nuevos desprendimientos de bloques de hielo”.
La avalancha se registró el martes pasado a las 09:00 horas de Perú (mismo tiempo de la Ciudad de México) en el nevado de Huascarán, que pertenece a Ancash, tiene 5 mil 800 metros sobre el nivel del mar y es el más alto de ese país, precisó Orellana.

El hecho ocurrió en un punto conocido como La Canaleta y un equipo de 11 policías y ocho miembros de la AGM desplegó hoy en la madrugada una labor de rescate en el sitio.
“Parece que los cuatro están dentro de una grieta de 50 metros de profundidad”, contó, por su parte, la periodista peruana Laura Urbina, corresponsal del periódico “El Comercio”, de Lima, en Ancash, en otra conversación telefónica con EL UNIVERSAL.
Una patrulla entró en la tarde del martes y salió ayer en la mañana tras rescatar con vida a dos montañistas españoles y a dos guías peruanos, relató Urbina.
Con heridas diversas, los cuatro fueron llevados a una clínica en Huaraz.

Los españoles se movilizaron separados de los mexicanos, por lo que se confirmó que solo esos dos grupos permanecían en el nevado cuando ocurrió la avalancha.
Personal diplomático de la embajada de México en Perú se desplazó a Huaraz, para seguir el curso de los acontecimientos.