Breves de espectáculos

CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 22 (EL UNIVERSAL).- Apenas entras a la sala permanente del Museo Tamayo Arte Contemporáneo y te topas con “Square form with Circles”, de Barbara Hepwoerth; esa obra en negro, de gran volumen, comparte espacio con “Two Figures with a Monkey”, de Francis Bacon y Peinture, de Joan Miró; escudadas por dos obras singulares de Mark Rothko: un colorido óleo sobre tela de 1947, y una acuarela a lápiz y tinta sobre papel, de 1970.
Esas hermosas obras que se complementan con otras como “Figuras”, 1960, de Antoni Tàpies y “Retrato de la madre del artista, ca”.

1963, de Alberto Giacometti, que no se había exhibido y que es sumamente delicada porque fue hecha en la técnica de punta de plata sobre papel, son parte del conjunto de 40 piezas que conforman la exposición Colección Museo Tamayo, la cual ofrece una selección del acervo iniciado por el propio Rufino Tamayo y su esposa, Olga, que donó el propio artista al pueblo de México.
Pero esa exposición de arte internacional, que también contiene arte de Pablo Picasso, Eduardo Chillida, Pierre Soulages, Max Ernst, Roberto Matta, Wolfgangy Tillmans y Francisco Toledo, no está sola, comparte espacio con la muestra “Rufino Tamayo.

Primeras décadas: 1920-1959”, que exhibe alrededor de 80 obras, entre dibujo, gráfica, pintura y escultura del trabajo temprano del artista oaxaqueño.
Ambas muestras se presentan tras ocho años de no exhibirse un conjunto de obras de Rufino Tamayo, y piezas de la colección que conformó el artista junto con su esposa Olga.

Con esas exposiciones se salda una deuda pendiente con Tamayo, pues se ha creado un espacio especial para presentar tanto su obra personal como su colección de arte internacional.
Pero también se sacan de la bodega piezas que no se habían exhibido y que, a decir del secretario de Cultura, Rafael Tovar y de Teresa, era incomprensible que exista un museo dedicado a Rufino Tamayo donde no se podía ver la obra del artista.
“Resulta prioritario que cumplamos la voluntad y que las obras salgan de la bodega, así lo digo, con toda la crudeza, para que puedan exhibirse y todos los niños, los jóvenes, los adultos podamos tener una referencia en un museo para conocer obras de estos artistas fundamentales del siglo XX”, señaló Rafael Tovar y de Teresa.
Lo afirmó al hacer un recorrido por las exposiciones que dan cuenta del artista y del coleccionista que fue Rufino Tamayo.

Se trata de dos exposiciones importantes que muestran los primeros trabajos del pintor oaxaqueño, pero también muestran su mirada de coleccionista con obras de artistas que también fueron sus amigos y creadores de su generación.

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Fifth Harmony busca conquistar coloso de Reforma
CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 22 (EL UNIVERSAL).- Cuando uno piensa en los ganadores de realitys shows musicales inmediatamente surge la idea de que serán cantantes o grupos que tal vez no logren permanecer en la escena musical por mucho tiempo o a quienes su popularidad bajará tan rápido como subieron.

Pero para sorpresa de propios y extraños, existen ocasiones en las que el talento, la belleza y un poco de suerte, se unen para ofrecerle al público alguien que perdura.
Este es el caso del grupo Fifth Harmony, quienes vieran la luz en el año 2012 al participar en la segunda temporada del programa The X Factor, y en donde pese a obtener el tercer lugar en la competencia, firmaron un contrato tiempo después y al lanzar su primer sencillo titulado Miss Movin ´On entraría inmediatamente en la lista de Billboard Hot 100 y conseguirían una certificación de oro y tan sólo unos meses después ganarían un premio de Mtv.
Después de una entrada en ascenso inmediato, no es de extrañar que sus integrantes empezaran a llamar la atención de más de uno.

Compuesto por Lauren Jauregui, Camila Cabello, Ally Brooke Hernández, Normani Kordei y Dinah Jane Hansen, las chicas intentaron triunfar por separado como solistas en la misma competencia, pero Simon Cowell sería quien las uniría como grupo al ver sus cualidades.

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Raw Fabrics escoge a México en su nueva etapa
CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 22 (EL UNIVERSAL).- El proyecto de Jack Bruno llegará a tierras mexicanas este sábado para abrir el concierto de She wants revenge, agrupación que celebra una década del lanzamiento de su álbum debut homónimo.
El músico de 23 años de edad es el único integrante de Raw Fabrics que decidió continuar con este proyecto.

Esta será una de las primeras presentaciones en solitario fuera de su natal Estados Unidos.
“Es una experiencia muy loca, es un balance entre el sonido del disco y la energía que mostramos en vivo que es muy divertida de proyectar”, declaró en entrevista telefónica.
El proyecto que inició en 2013 ha obtenido popularidad en redes sociales, pero es en los conciertos donde han obtenido mayor respuesta.
Bruno trabaja en nuevo material, aunque no está seguro si será lanzado como un disco o en sencillos, promete que será un álbum totalmente diferente, pues es la primera vez que dejara de autoproducirse.

El Universal