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Perfil. Eusebio Ruvalcaba, el escritor que vino a escuchar música

"Pese a que se gana la vida coordinando talleres de creación literaria y escribiendo en diarios y revistas, Eusebio Ruvalcaba dice que vino al mundo a escuchar música"
miércoles, 8 de febrero de 2017
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CIUDAD DE MÉXICO, febrero 8 (EL UNIVERSAL).- "Pese a que se gana la vida coordinando talleres de creación literaria y escribiendo en diarios y revistas, Eusebio Ruvalcaba dice que vino al mundo a escuchar música".

Así se autodefinía el autor de “Un hilito de sangre”, novela por la que a sus cuarenta años ganó el “Concurso Literario Agustín Yáñez”.
Formador de escritores y melómano empedernido, el ensayista, poeta y narrador nació en Guadalajara, Jalisco, en 1951.

Su pasión por la música le hizo firmar varios libros dedicados a ella. “Con los oídos abiertos. Aproximaciones al mundo de la música”; “Elogio del demonio” y “John Lennon tuvo la culpa” son algunos títulos.
Ruvalcaba solía explicar su vena musical por el hecho de que fue hijo del violinista Higinio Ruvalcaba y la pianista Carmen Castillo Bentauncourt.

"Cuando él, Eusebio, oye música, es como si regresara a la placenta", describió en su blog, donde solía publicar constantemente.
Y es que a Eusebio Ruvalcaba le gustaba experimentar la literatura en soportes diferenes al papel.

Cuento, poesía, ensayo y diversos artículos nutren su blog, cuya última publicación fue el 16 de diciembre de 2016.
Durante una entrevista con EL UNIVERSAL en 2013, el autor de “El portador de la fe” explicó: "Los editores tienen un gran corazón, creo que me editan porque han de decir: si no le editamos este señor se va a suicidar.

Para mí es un modo de cristalizar mi trabajo, pero yo no estoy apegado a las editoriales de éxito, sino a quien me abre las puertas".
Ruvalcaba también fue un transgresor de generaciones pues entre sus seguidores se hallan muchos jóvenes.

Muchos de ellos no faltaban a los talleres que impartía en diversos sitios, incluso reclusorios.
Entre los premios que recibió se encuentran: el Premio de Cuento El Nacional 1977 por Antisonata.

Premio Punto de Partida de Teatro 1978 por “Bienvenido, papá”.
Asi como el Premio Nacional Agustín Yáñez 1991 por su primera novela, “Un hilito de sangre”.

El Premio Nacional de Cuento San Luis Potosí 1992 por “Jueves santo” y el Premio Internacional de Cuento Charles Bukowski 2004 por “El despojo soy yo”, convocado por Anagrama.

El Universal /

 

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