Discriminación: La única raza que existe, es la humana

La discriminación en Reynosa existe, aunque todos tenemos los mismos derechos humanos. Personas llegan a la ciudad, desde otro país u otro Estado, para buscar una mejor oportunidad.

En esa búsqueda, las personas sufren la práctica discriminatoria por razones raciales, étnicas y de nacionalidad.

El 21 de marzo, Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, recuerda la matanza de Sharpeville, “ese día, en 1960, la policía abrió fuego y mató a 69 personas en una manifestación pacífica contra las leyes de pases del apartheid que se realizaba en Sharpeville, Sudáfrica” (ONU, 2017).

En ese sentido, la ONU proclama promover el respeto, la seguridad y la dignidad de los refugiados y los migrantes en todo el mundo.

A Reynosa llegan miles de migrantes cada año, tienen que dejar familia, hogar, creencias y tradiciones. Encima de ello, sufren todavía por la discriminación racial.

LA HISTORIA DE UN CUBANO

Él salió de Cuba en el 2006. Viajó en una balsa durante 30 días, acompañado de otras 19 personas. Hace dos meses fue deportado de Estados Unidos, por la frontera de Reynosa, y ya lleva dos meses en la ciudad.

Por cuestiones de seguridad, su nombre será omitido.

“Yo salí en el 2006 de allá de Cuba y vine en balsa a Honduras, donde veníamos 19 gentes. Ahí llegamos a Honduras y de ahí me vine a Villahermosa, Tabasco.

Estuve un tiempo trabajando, hasta que me pasé para el norte”, explicó.

Ser cubano no es fácil. La gente se burla del acento, del origen, de las vidas ajenas. Por dos meses no ha podido salir de la Casa del Migrante en donde se encuentra.

Los migrantes tienen miedo de salir a las calles, donde fácilmente son reconocidos, por tener color de piel y acento diferentes.

“Problema donde quiera uno lo tiene. La gente dice ´oye tú, cubano, cómo hablan aquí, que no sé qué, que no sé cuánto´.

Hay muchos que te tratan bien, pero otros no”, aseguró el cubano.

Agregó: “sabemos que los lugares fronterizos están malos, pero problemas tiene uno donde quiera”.

Recordó los malos tratos que recibió en Estados Unidos, debido a su origen cubano, aseguró que “no son buenos”, pero que “ellos son los que mandan”.

Al salir de su país, el migrante cubano nunca se volvió a sentir como en casa, siempre extrañando a la familia, pues dejó hijos, esposa y nietos.

TODOS SOMOS IGUALES

La discriminación es una distinción que se hace a ciertas personas o a cierto grupo de personas, ya sea por raza, color, etnia o cualquier otra diferencia que consideren las mismas personas, explicó Gustavo Guadalupe Leal González, responsable de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Tamaulipas, en Reynosa.

A la ciudad llegan muchas personas de otros países u Estados. Por ejemplo, personas originarias de Veracruz llegan a Reynosa para buscar una oportunidad de trabajo y de mejorar económicamente.

No obstante, constantemente son discriminados.

“Es el caso también de los migrantes. Los migrantes, a veces se puede dar lugar a que se realicen actos denigrantes en contra de ellos, que van en contra obviamente de su dignidad por el simple hecho de ser de otro país.”, compartió.

Aunque existen personas que respetan la dignidad de sus semejantes, aun no se logra eliminar completamente la discriminación racial.

Una de las formas de discriminar a las personas originarias de Veracruz, es a través del insulto verbal, la burla, el sarcasmo.

“Hay muchas formas de hacerlo. La mas ‘clásica’ que conocemos es ’tu eres jarocho’ o por ejemplo en otras partes de la República dicen ´tu eres de San Huicho´, es decir, de San Luis Potosí”, indicó Leal González.

TODOS SOMOS PERSONAS

“Esas cuestiones son denigrantes, porque todos somos seres humanos, todos somos personas y aquí no existe ninguna distinción en ese aspecto”, explicó Gustavo Guadalupe Leal González, responsable de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Tamaulipas, en Reynosa.

En ese sentido, todos los seres humanos tenemos los mismos derechos y las mismas obligaciones.

“Realmente no existe tampoco ni la división, inclusive, no existen las razas. La única raza que existe es la raza humana”, reveló.

Los seres humanos tienen el mismo valor, no importa la raza, edad, sexo, nacionalidad, aspecto…todos somos seres humanos.

No obstante, lo que puede iniciar como una simple broma, puede salirse de tono para herir a las personas, tras burlarse de otra persona.

“No se debería de dar porque todos somos seres humanos y son costumbres que son difíciles de erradicar”, externó.

Finalmente, reconoció que es mucho el camino que hay que recorrer y que es difícil crear una conciencia en la ciudadanía para que respeten a los demás, pero que lo más importante es fomentar los valores y la educación en los pequeños, que son el futuro del mundo.

Cabe mencionar que, el Día internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, se creó para combatir la discriminación racial en todo el mundo.

Conseguirlo no será fácil, pero tampoco es imposible. ¡No a la discriminación racial!