Vello púbico ¿Depilar con cera o afeitar?

(EFE) El método de depilación siempre debe resultar cómodo, práctico y también efectivo, pero es necesario ser muy cuidadosa al tomar la decisión de hacer una depilación total de esa zona, después de todo el vello cumple una función de protección.

Ventajas de la depilación con cera

Rápido y eficaz el método de depilación con cera para eliminar el vello púbico resulta efectivo pues la duración es de entre tres y cuatro semanas, siempre dependiendo del crecimiento del vello.

La cera fría es más recomendable para esa zona ya que resulta más suave y no resulta tan doloroso el procedimiento como con la cera caliente, sin olvidar aplicar una crema o loción humectante después de la depilación para evitar que la piel se irrite.

Desventajas de la depilación con cera

Si tienes una piel sensible la depilación con cera puede causarte dolor o molestias durante el procedimiento, además de provocar irritación o enrojecimiento en la zona si no se realiza con cuidado.

Lo recomendable es que si no tienes práctica para hacer una depilación con cera en casa lo hagas en un salón especializado, evitarás problemas como infecciones o quemaduras.

Ventajas de afeitar el vello púbico

Afeitar el vello púbico es más rápido y deja la piel suave inmediatamente después de realizado el procedimiento. Por otra parte, tiene la ventaja que puedes hacerlo tú misma en casa utilizando una máquina eléctrica o de las del tipo desechable.

Recuerda que debes humedecer la zona púbica, aplicas gel especial y recién después proceder a depilar el área.

Terminado el procedimiento, será necesario secar bien la zona y aplicar crema humectante.

Desventajas de la afeitada

Entre las desventajas de utilizar este método es la posibilidad de causar enrojecimiento, irritación y provocar vellos encarnados a medida que el pelo vuelve a crecer.

La duración es de unos tres días y por lo tanto exige un mantenimiento continuo para lograr un aspecto perfecto y recuerda que siempre corres el riesgo de lastimar la piel y sufrir alguna infección posterior.