¿Caimanes en el río Bravo?

Recientemente se documentó la presencia de caimanes en el río Bravo, a la altura de Monclova, en el Estado de Coahuila.
Durante la semana que pasó se localizó un ejemplar en un recodo del mismo río cercano a Mission.
El tema no es nuevo.

El 10 de diciembre del 2012 se dio difusión en los medios locales y en cadenas de televisión de los dos lados de la frontera del avistamientos de ese tipo de animales por parte de personas que habitan cerca del afluente.
A consecuencia de lo anterior, Protección Civil y Bomberos realizaronr ecorridos para verificar la información, sin encontrar evidencias concretas.
Sin embargo, fueron colocados en varios puntos del río, especialmente por donde cruzan con más frecuencia los migrantes, letreros que advertían de la presencia de lagartos.
Un video del 9 de mayo del 2009 muestra a un ejemplar pequeño de caimán que hallaron unos jóvenes en el río.
Se ve cómo uno de ellos sostiene en sus manos al saurio, de apenas unos 35 centímetros de largo y luego se lo entrega a un elemento del Escuadrón de Rescate Acuático de Reynosa.
Marco Antonio Martínez Alvarado, Coordinador de Protección Civil y Bomberos, dijo que se han realizado en las últimas fechas recorridos en lancha y rescates de ahogados, pero no se ha detectado la existencia de caimanes o lagartos, al menos en éste tramo del río.
Sin embargo, empieza a cundir el temor entre los migrantes que se aventuran a cruzar la traicionera corriente a nado o con el auxilio de flotadores.
Ahora, aparte de los remolinos y las crecientes, los aspirantes a braceros tendrán que cuidarse de los depredadores de gran tamaño.
Hasta ahora se manejan varias hipótesis: La primera, que la misma gente los echa al río después de adquirirlos para tenerlos como mascotas en sus acuarios, cuando éstos crecen.
La segunda y más tenebrosa relata que las autoridades del vecino país han traído ejemplares de caimán, muy comunes en los pantanos de Florida, como un elemento más de disuación para los miles de migrantes que aún se aventuran a cruzar el río.
Pescadores de la zona han reportado catanes de hasta 2 metros y medio mediante sus cuentas de Facebook, pero hasta ahora nadie ha grabado en video o extraído del agua un caimán vivo.