Por: Jesús Rivera
La Procuraduría Federal del Consumidor atendió durante los cuatro días de El Buen Fin un total de siete reclamaciones y procedió a suspender las actividades de un establecimiento comercial por no respetar el precio publicado de un producto.
Alberto Martínez Cavazos, titular de la Subdelegación Regional de PROFECO, destacó que el monto de lo reclamado fue de 21,682 pesos, de los cuales se logró recuperar 14,687 pesos mediante la conciliación de partes.
En asesorías se otorgaron doce, cinco de las cuales fueron sobre los derechos del consumidor, seis sobre trámites que realiza la dependencia y una de orientación sobre atención de otras autoridades.
De las reclamaciones, 2 fueron de la empresa FAMSA, 3 de Supercolchones, 1 de Liberpool y otra más de Coppel.
La mayoría de ellas fue por incumplimiento de promoción.
En el caso concreto de FAMSA se procedió a la suspensión de actividades por no resolverse los dos reclamos de incumplimiento.
A pesar de que se buscó la mediación, no se pudo llegar a un acuerdo.
El funcionario dijo que FAMSA, Sucursal Modelo, promocionó unas bocinas a 99 pesos, cuando su precio normal era de 1,099 pesos.