Cuaresma, oportunidad para adquirir hábitos saludables

Inició la Cuaresma lo cual es una excelente oportunidad para adquirir hábitos de alimentación saludables, toda vez que el menú que se procura en esta temporada la gran mayoría de las familias mexicanas, disminuye la ingesta de productos de origen animal, que contienen una mayor cantidad de grasa y colesterol, y aumenta los alimentos de origen vegetal y de pescados y mariscos, que son fuente importante de Omega 3.
La directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 33 del IMSS instituto Mexicano del Seguro Social en Reynosa, Tamaulipas, Araceli Magdalena García Hernández, informó que la ingesta de salmón, atún, trucha, frutas, verduras, frijol, garbanzo y lentejas, sin capear, freír o empanizar debido al alto contenido de grasa, siempre son una opción saludable para consumir durante todo el año.
En este sentido, reveló que una buena opción es cocinarlos en papel aluminio y combinarlos con verduras como jitomate, cebolla, champiñones o rajas de chile, para que no pierdan la calidad de las proteínas que contienen.

Igualmente en el caso de los chiles rellenos, “en lugar de ser capeados, deben prepararse al horno o en caldillo de jitomate para no impregnarlos de aceite”.
Refirió la directora de la clínica del IMSS que un alimento tradicional de la temporada es el atún, que se presta para prepararlo con una gran variedad de verduras y cumplir con las características que marca el plato del bien comer, que sugiere combinar los diferentes grupos de alimentos.
Dijo que la alimentación balanceada ayuda a la población a evitar problemas de salud como las dislipidemias (colesterol y triglicéridos altos) que van dañando las paredes de las arterias, factor de riesgo para un infarto al corazón o derrame cerebral.
Derivado de lo anterior, la especialista en Medicina Familiar del Seguro Social, enfatizó que la sana alimentación no debe ser exclusiva de la Cuaresma, sino practicarse de manera permanente privilegiando los cereales, frijoles, habas, lentejas, garbanzos, verduras, lácteos, quesos bajos en grasa, pescados, mariscos y aves, y no cancelar, pero si disminuir el consumo de la carne roja.
Dijo que una parte importante para conservar la salud, es el consumo de agua, que debe ser de hasta ocho vasos diarios en un adulto, preferentemente agua natural y evitar definitivamente la ingesta de refrescos por su alto contenido de azúcar y otros endulzantes.
Por último, y como un complemento necesario a la alimentación saludable, recomendó practicar ejercicio diariamente con el objetivo de evitar enfermedades crónico degenerativas que deterioran la calidad de vida, así como acudir a su Unidad de Medicina Familiar de adscripción para recibir orientación médica a través de PrevenIMSS.