Los hechos ocurrieron alrededor de las once de la mañana en un tramo de la carretera Reynosa-Río Bravo que tuvo que ser cerrada parcialmente a la circulación, mientras que las autoridades realizaban diversas diligencias relacionadas con el aseguramiento de una camioneta y diversas pruebas por parte de Servicios Periciales y la Agencia de Investigación Criminal de la PGR.
Los agentes federales fueron tiroteados desde una camioneta Yukon, color azul, con placas de circulación de Texas, en la que se desplazaban varios civiles que tenían en su poder armas de fuego de uso exclusivo y reservado para las fuerzas armadas.
Los civiles armados dispararon a los federales y se dieron a la huida rumbo a una de las brechas cerca al centro recreativo El Camito.
La brecha conduce al ejido El Guerreño.
La ponchadura de una de las llantas obligó al grupo de civiles a abandonar la Yukon en un camino vecinal y continuar su retirada a pie, entre viviendas que se localizan en un fraccionamiento cercano, así como entre los matorrales.
Al arribo de los agentes, se ubicó la camioneta abandonada y en su interior un chaleco antibalas, cartuchos y otros aditamentos balísticos que fueron asegurados.
Los elementos de la Policía Federal recibieron apoyo de fuerzas que forman parte del Grupo de Coordinación Tamaulipas.
La camioneta y lo encontrado en su interior fue puesto a disposición de la PGR, debido a que se trató de una agresión contra elementos federales.