REFLEXIÓN DOMINICAL

Antonio Fernández

0
Votos
Nota Aburrida
Nota Interesante
El poder divino en la voluntad humana

…“Y lo caído en buena tierra, son aquellos que oyen con el corazón recto y bien dispuesto y guardan consigo la palabra y dan fruto en la perseverancia”… ( Lc 8, 15)
domingo, 24 de febrero de 2019
Comparte esto en Facebook
Comparte esto en Twitter
Comparte esto en Digg
Enlarge Font
Decrease Font
San Isidoro de Sevilla, Doctor de la Iglesia Teólogo y escritor del siglo VI, en su tiempo da a conocer donde radica el poder divino en la voluntad humana, bien por excelencia del alma y como el mal puede ser reducido y vencido; …“El paso de Dios constituye una fuerza interior en el corazón del hombre merced a la cual brotan los buenos deseos a fin de destruir los malos.

Así pues, cuando surgen en el corazón humano estos deseos, hemos de saber que entonces Dios asiste con su gracia al corazón humano. Por lo tanto, entonces debe el hombre excitarse más a la compunción (pesar y pena) cuando se da cuenta que Dios opera en su interior”… La naturaleza humana es conocida en toda su medida, tamaño e importancia por Dios, como creador de cada ser humano conoce en él lo que es, quiere y no quiere dejar de ser, ello debiera ser causa a una adecuada reflexión que conduzca a valorar el conocimiento que Dios conoce del corazón de cada persona lo guardado, anquilosado a propósito escondido ya que los deseos, aspiraciones y realizaciones siempre serán para mayor gloria de Dios.

Por otra parte, está la presión de la tentación, inclinaciones y perversidades se convierten en una bomba de tiempo que de estallar se perderán los bienes eternos, ello significa hacer y obrar, vencer y desechar por ser Dios quien aprecia al momento las intenciones e inclinaciones del corazón a fecundar esa tierra árida para que no muera y su semilla fructifique.

La función del corazón en cada persona es impulsar la circulación de la sangre para conservar la vida de toda persona. La conducta humana nos hace ver según expresamos el buen o mal corazón, entendiendo como el lugar donde residen los sentimientos y emociones, deseos y pasiones.

Pero al hablar del Sagrado corazón de Jesús es revivir el momento que el soldado romano da la lanzada traspasando el costado de Cristo Nuestro Señor ya sin vida, la fuerza ejercida hizo que la lanza penetrará el cuerpo del Señor inmóvil y destruye el Sagrado Corazó más limpio y puro, generoso y misericordioso que el mundo tuvo la gracia inmerecida de tener durante treinta y tres años cumpliendo la misión encomendada por Dios su Padre.
El Profeta Jeremías expone a los siglos la importancia que para Dios Nuestro Señor es el sentimiento del corazón humano profetizo, así todo hijo creado por Dios no se haga el desentendido de sus actos cayendo en la hipócrita creencia ¡nadie me vio! …“El corazón es el más traidor que ninguna otra cosa incurable; ¿Quién lo conocerá? Dijo el Señor: Profundizo el corazón y doy a cada cual, según su conducta, según el fruto de sus obras”… Cierto, el corazón es el símbolo de amor a Dios, el problema en los seres humanos es que conociendo la necesidad de arraigarse en la perseverante vida espiritual muestre al Señor el amor que afirma inspirado en su doctrina, mandamientos y su palabra en los Santos Evangelios, no haga de ello el medio que armonice el alma a mantener y acrecentar la fe conservando la rectitud del corazón que reflejará la pasión de amar y servir a Dios y al prójimo cumpliendo el mandato divino; pero muchos molestos, irritados y escépticos aflora de su corazón la inmoral expresión; … ¿Como es eso de que todo lo que haga tiene que ser para Dios? …Imposible pensar en Dios como imposible agradar a Padre tan amoroso lo que del se ha recibido sin mérito: la vida, el alma, el cuerpo, su misericordia, su bondad y mucho más…La providencia de Dios exige de nuestra parte confianza en Él, el ser humano preocupado en poseer bienes materiales y alimentación, el Señor para ubicar su destino de salvación conforta a los siglos; …“Mirad las aves del cielo, que no siembran ni siegan, ni juntan en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta.

¿No valéis vosotros mucho más que ellas?”… ¿Por qué no reconocer su providencia divina siempre en favor de las almas y cuerpos creados por Él? Estos lo miran y se quejan de ser malo e indiferente ante sus necesidades por lo general temporales y no espirituales, así es la ingratitud soberbia del ser humano ¿Culpa de lo que es su culpa? La cerrazón obstinada vuelve a la carga; …Se quiere que piense en Dios cuando voy al antro, al bar, a divertirme, a comer, eso es para tenerle a uno maniatado a una cosa que no se ve ni se siente …Así y más perversos son los corazones cerrados en su “Yo” obscecados y encerrados en un círculo vicioso que de momento muy bien, pero el tiempo este le mostrará el error que hoy no se corrigió.

El arrepentimiento del corazón empecinado no se da en la tierra estéril, es infecundo porque no permite sea sembrada la buena semilla; tierra infértil carece de lo esencial para fructificar, el alma para estar en gracia debe ganar el derecho a ser depositada en su alma al bien que motiva y fortalece alma y corazón.

La tentación despierta la inclinación del corazón e incita evitar los bienes que engañosa muestra al pecador de seguir la doctrina impartida por Cristo Nuestro Señor es una carga pesada y cansada, molesta e incómoda, excita el corazón a las obras malas en todos los ordenes de la vida, Cristo Nuestro Señor alerta de esa mala inclinación del corazón, su voz se pierde en la vorágine de la vida humana en el mundo, en los sobresaltos y la nula paz interior que no puede detenerse ya que ha alcanzado tal velocidad que se asemeja a una locomotora que arrastrando decenas de carros cargados de materiales pesados se intenta detener en un instante; en el caso del ser humano si se impone su voluntad al deseo de cambiar la vida engañadora, el impulso del corazón es más potente que la locomotora porque la voluntad es de tal fuerza que decidiéndose logra el propósito, atendamos a Jesucristo Nuestro Señor cuando refiriéndose al corazón anima; …“Pero lo que sale de la boca, viene del corazón, y eso mancha al hombre”…Predica el Señor la perfección del alma, creer que porque se ha leído su palabra estoy bien, al contrario, más oportunidades se presentaran para romper lo leído del corazón, su palabra en el corazón puede ser una semilla sembrada sobre rocas que la han secado, mas la esperanza para Dios es permanente en las almas, por ello con amor paternal alienta hacer realidad su palabra; …“Haced (que sea) el árbol bueno y su fruto bueno, o haced (que sea) el árbol malo y su fruto malo, porque por el fruto se conoce el árbol”…, de donde atraemos la ilustración de San Francisco de Sales; …“El bien no hace ruido y el ruido no hace bien”…
El Abad Jacobo dijo; Así como una lámpara ilumina una habitación oscura, así el temor de Dios, cuando irrumpe en el corazón del hombre, le ilumina y le enseña todas las virtudes y mandamientos divinos… El problema de la vida humana es evitar los pecados, luchar y vencer las tentaciones, ello no se piensa con la seriedad debida porque la vida nos envuelve en proyectos, programas, negocios, cumplir fechas conmemorativas personales y sociales de todo tipo, objetivos propios que ocupan un lugar primordial en la mente considerados fáciles de cumplir, pero al momento en que aparece un obstáculo simple y pequeño viene como anillo al dedo la disculpa para abandonarlo y con ello la turbación ¿Lo hago o no lo hago? Así lo que en principio no se hizo es porque ya no se quiere hacer sea cual fuera la razón la excusa y justificación para no hacerlo, sí esto se hace en las cosas del mundo que vemos la conveniencia se rehúye, lo curioso es que la misma conducta es en las cosas que más necesitamos para cumplir nuestras obligaciones con Dios, en la justificación y el rechazo se expresa molestia con expresiones impropias de un hijo creado por Dios, no es exageración es una realidad porque todos hemos caído en esta anormal actitud de la que muy pocos se arrepienten, equivalen a la semilla sembrada sobre el camino de la vida pisoteada por la negligencia humana, no se reconoce que se hace, se muestra ignorancia o justifica desconocimiento de todas formas para todos reza el salmo del Rey David; …“Porque, yo reconozco mi maldad, y tengo siempre delante mi delito” …
Así como Cristo Nuestro Señor previene, así también conforta y anima, consuela y reaviva la fe al mostrar las bondades que espera del corazón bueno que le ama se conserva en gracia, al perseverar en los propósitos virtuosos de amar y servir al prójimo viendo en él a Dios mismo, el Señor espera esto y más porque conoce la magnitud trascendente del corazón que se inclina hacer el bien y evitar el mal; …“¿Cómo podéis decir cosas buenas, malos como sois? Porque la boca habla de la abundancia del corazón.

El hombre bueno, de su tesoro de bondad saca el bien; el hombre malo, de su tesoro de malicia saca el mal”… El fruto de la semilla en la que repitiendo Jesucristo Nuestro Señor es sembrador y el cristiano católico obrar en ser por sí mismo tierra fértil es tarea de todos los días, la semilla lanzada caída en terreno pedregoso al poco tiempo se seca, la que cae entre abrojos estos la ahogan y la que lanzada se va al camino será machacada por los pies de los que pasan, habremos pues de comprender y valorar, somos una tierra sembrada por Dios, que es y será siempre su palabra semilla divina de infinita fecundidad.

Ahora bien, quien la recibe y la deja germinar en su corazón, dará frutos eternos, este es el pensamiento a meditar por el cristiano católico a definir: …En verdad quiero ser beneficiado por la semilla depositada en mi corazón por el Señor … La respuesta no debiera titubear a si quiero o no, en el acto abrigarse en ella y superar las adversidades del mundo, de la vida y en palabra obra y pensamiento en al corazón de Cristo Nuestro Señor hacerle escuchar de nuestros labios; … ¡Señor te amo! Mi deseo es amarte, ayúdame en ello, porque puedo flaquear y no seré digno de ti …Dijo el Señor a San Pablo: …“Te basta mi gracia, porque el poder triunfa en la debilidad”…Confirmado el poder divino en la voluntad humana.


Jesucristo Nuestro Señor, infatigable en la predicación de su doctrina, no deja de enseñar a la muchedumbre que le rodeaba a la que propone la parábola del sembrador; …“Como se juntase una gran multitud, y además los que venían a Él de todas las ciudades, dijo en parábola: El sembrador salió a sembrar su simiente.

Y al sembrar, una semilla cayó a lo largo del camino: y fue pisada y la comieron las aves del cielo. Otra cayó en la piedra y, nacida, se secó por no tener humedad.

Otra cayó en medio de abrojos, y los abrojos, que nacieron juntamente con ella, la sofocaron. Y otra cayó en buena tierra, y brotando dio fruto centuplicado.

Diciendo esto clamó: ¡Quien tenga oídos para oír oiga”… A la gente les pareció extraño y se preguntarían; …¿Qué tiene la forma de sembrar, que nos quiere decir, sabemos muy bien que la semilla debe ser sembrada sobre la tierra preparada, también sabemos que al lanzar el sembrador la semilla sobre el terreno al ir por la orilla se va al camino o cae entre piedras o sino está limpio el terreno los abrojos al nacer ahogan la planta? Conocemos la perdida al sembrar se batalla con los sembradores a que aprovechen cada semilla y concentran en hacer su trabajo, pero eso que tiene que ver con Dios, ser buenos, cumplir nuestras obligaciones, no entendemos …Esto y más serían los comentarios, murmuraciones y hasta maldiciones, bien sabemos que cuando se trata de comentar algo incomodo se muestra molestia abiertamente o con sutileza se destruye la obra o se hace oídos sordos a no comprender.

En la enseñanza de Cristo Nuestro Señor nada es vano ni pérdida de tiempo. Deja el Señor que la gente se retire, su parábola era punto de comentario en el regreso a su casa, unos tratando de entender que quiso decir, otros afirmando que hay una buena idea en ello, así fueron desmenuzando a base de comentarios sea en grupo o a solas hasta que después de pensar y pensar encontraron la razón de la parábola del sembrador y concluirían, Jesús es el sembrador.

Como a muchos nos ha sucedido no entendemos a la primera la explicación, los discípulos no habían entendido la parábola del sembrador, y con plena confianza se acercan al Señor mostrando deseo de aprender pidiendo les explique su significado, no es de dudar que estuvieron pensando lo mismo que la gente, pero por la cercanía a Jesús sabían que cuando habla el Señor enseña, se decidieron pedir explicará la parábola, Él cómo los ama condesciende como Padre amoroso a instruirlos.

Reflexionando en ello, el Señor da el camino a os siglos pide depositar la fe y confianza en Él. Continua el evangelista; …“Sus discípulos le preguntaron lo que significaba esta parábola.

Les dijo: A vosotros les ha sido dado conocer los misterios del reino de Dios; en cuanto a los demás (se les habla) por parábolas, para mirando, no vean; y oyendo, no entiendan”…
Con palabras sencillas explica a sus discípulos; …La parábola es esta: La simiente es la palabra de Dios”... El Señor es el Sembrador solo a Él se le aplica este título, de ello dice San Beda; …“Estando en el seno del Padre, adonde no puede tener acceso criatura alguna, vino a la tierra para dar testimonio del la verdad”…Agrega San Juan Crisóstomo; …“Y queriendo reconciliarnos, vino a nosotros para hacernos oír su palabra y por ella llevarnos a Dios” … Continuando dijo; …“Los de junto al camino, son los que han oído; mas luego viene el diablo, y saca afuera del corazón la palabra para que no crean y se salven.

Los de sobre la piedra, son aquellos que al oír la palabra la reciben con gozo, pero carecen de raíz, creen un tiempo, y a la hora de la prueba, apostatan.

Lo caído sobre los abrojos, son los que oyen, mas siguiendo su camino son sofocados por los afanes de la riqueza y los placeres de la vida, y no llegan a madurar”… A ello expone San Gregorio; …El Señor se dignó exponer lo que decía, para que aprendamos nosotros a buscar el sentido de lo que por sí mismo no quiso explanar (dar a conocer con claridad) Concluye su Cátedra; …“Y lo caído en buena tierra, son aquellos que oyen con el corazón recto y bien dispuesto y guardan consigo la palabra y dan fruto de perseverancia”… Palabra de misericordia, amor y bondad, dulzura y ternura, es el poder divino en la voluntad humana está en vez de eludirlo, debiera por el conquistar la eternidad.
hefelira@yahoo.com

 

Opina sobre este artículo

Nombre   Email  
Título
Opinion

Columnas Anteriores

Otras Noticias