Hoy lunes 02 de marzo inicia el ejercicio más importante para México, el Censo Poblacional 2020 que llevará a cabo el Instituto Nacional de Estadística y Geografía para saber con certeza cuántos somos, dónde nos concentramos y en qué condiciones vivimos; actividad que será relevante no sólo por la importancia de sus resultados, sino por la implementación de tecnología por primera vez en una encuesta de tal magnitud, con la que se pretende garantizar la precisión de la información y refrendar la seguridad de que los datos recabados no se filtrarán a terceros.

“Por primera vez en la historia vamos a utilizar en lugar de papel en cuestionarios, un dispositivo de cómputo móvil que sustituye al papel… como está en contacto permanente a través de la red 3G al momento en que concluye el cuestionario esos datos se van a nuestros servidores en Aguascalientes y quedan encriptados y asegurados”, declaró Marco Antonio Chapa Martínez, Coordinador Estatal de INEGI.

La ventaja de este método es que además de enviar inmediatamente la información a la base de datos esta no podrá ser manipulada o copiada por el entrevistador posteriormente, así como tampoco podrá ser sustraída si la unidad llega ser robada.

Al llegar a una vivienda el encuestador abrirá un formulario y comenzará a preguntar, tras anotar cada respuesta el dispositivo la encriptará y cambiará a la siguiente pregunta sin que el usuario pueda regresar a modificarla.

El aparato no puede ser utilizado como celular para hacer llamadas o enviar textos ni tampoco funciona para navegar en la web por lo que no hay riesgo de copiar la información y enviarla a otras personas.

“Si yo llego a su casa como entrevistador y le pregunto cuántas personas viven en su casa y usted me dice 4, yo le voy a poner 4 y le doy enter, en ese momento queda encriptado en el dispositivo, cuando concluye el cuestionario con todas las preguntas y le pongo punto final, en ese momento toda la información del cuestionario se va a lo servidores de Aguascalientes y se queda allá, se puede perder ese dispositivo saliendo de la vivienda pero la información ya está allá”, explicó Chapa Martínez.

El representante del INEGI descartó que este dispositivo pudiera llegar a ser atractivo para los amantes de lo ajeno ya que no puede ser utilizado para nada más que capturar información en el formulario instalado, sin embargo, la instrucción para los encuestadores en priorizar su integridad antes que pelear por lo material.

La misma instrucción es válida si llegan a verse amenazados al tratar de censar una vivienda en particular.

“Lo más importante es preservar la seguridad y no arriesgarse”.

En este tema de la seguridad, previamente se dialogó con las autoridades federales, estatales y municipales para contar con resguardo en las zonas consideradas como conflictivas.

A nivel local se conformó un comité de apoyo a través del que se ayudará al personal del INEGI para realizar su trabajo sin mayores contratiempos; no obstante, Marco Antonio señaló tener la confianza de que se logre cobertura total sin situaciones adversas, tal como se consiguió con el censo económico el año pasado.

“Estamos revisando ese aspecto y vamos a cuidar que todo salga como en el censo económico, en particular en Reynosa no hubo una sola manzana que no pudiéramos recorrer y obtener la información”.

Pero no sólo los trabajadores del INEGI pueden sentirse inseguros, también hay ciudadanos que temen recibir a los encuestadores por temor a que sean delincuentes aprovechando la situación.

Para generar mayor confianza entre la comunidad, los entrevistadores estarán plenamente identificados con el uso de sombrero, chaleco y mochila con el logotipo del INEGI, además de su gafete con nombre y folio que podrá ser verificado a través de la página web del INEGI o en el número 01 800 111 46 34.

En Tamaulipas serán alrededor de 6 mil ciudadanos los que trabajarán la coordinación y ejecución del censo, alrededor de 900 de ellos en Reynosa, siendo esta la estructura más grande de la entidad.

Este personal recorrerá del 02 al 27 de marzo las calles de la ciudad para censar todas las viviendas, habitadas y deshabitadas, así como también las residencias colectivas como unidades habitacionales, albergues, asilos, Casa del Migrante, Casa del Indigente, módulos de elementos de seguridad pública, caravanas de migrantes y los rincones de la vía pública que son utilizados permanentemente por personas sin hogar.

“Preguntamos sobre los residentes, no nos importa si tienen un día, una semana o 10 años residiendo en esa vivienda, el objetivo es cubrir todas las viviendas, estén en viviendas normales, colectivas o especiales, todos, sean población flotante o no, son censados, nacidos o no en México, si residen van a ser censados”.

En cada casa censada se dejará una etiqueta que identifique que ya cumplió con su participación, así como se dejará otra calcomanía en las casas identificadas como abandonadas.

Se estima que cada encuesta tendrá una duración promedio de 25 minutos, únicamente en casos especiales como en los hogares donde viven personas con discapacidad se agregarán otras preguntas que alargarán unos minutos el proceso.

Aunque la ley contempla la aplicación de una multa para aquellos ciudadanos que se nieguen a responder al censo, Chapa Martínez aseguró que confía en la participación de los reynosenses, pues ya han colaborado favorablemente en otro tipo de encuestas.

“Sí está previsto en la misma ley, la ventaja que tenemos es que en Reynosa acabamos de concluir el censo económico que es obtener información de la unidad económica de una empresa o establecimiento que es muy complicado, y prácticamente no tuvimos ningún problema… no contemplamos multas porque la gente participa”.

Cabe destacar que para el Censo Poblacional 2020 se destinará un recurso de 12 mil millones de pesos, presupuesto que en su 80% se transformará en salarios para sus trabajadores.