reiteró este miércoles ante representantes del Gabinete del Presidente Andrés

Manuel López Obrador, la urgente necesidad de establecer medidas en la frontera

norte del país para prevenir y contener posibles contagios por COVID-19.

Los mandatarios que integran la Conferencia Nacional de Gobernadores

(CONAGO) sostuvieron hoy otra videoconferencia sobre las medidas de acción

ante el COVID-19 con los titulares de las Secretarías de Relaciones Exteriores,

Marcelo Ebrard Casaubón; Seguridad Pública y Ciudadana, Alfonso Durazo

Montaño; Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval; Marina, José Rafael

Ojeda Durán; y el Comandante de la Guardia Nacional, Luis Rodríguez Bucio.

“Por nuestra frontera hay un gran movimiento de personas que llegan a territorio

nacional. Si bien es cierto que hemos desplazado personal de Salud y de

Bienestar Social a 15 de los 17 cruces internacionales, puesto que 2 de ellos solo

son ferroviarios; hemos identificado a personas que ya vienen contagiadas. Por

ello solicitamos apoyo para verificar a esas personas y limitar los viajes no

esenciales de Estados Unidos hacia México”, señaló el Gobernador.

El mandatario tamaulipeco solicitó además el respaldo del personal las Fuerzas

Armadas para apoyar al personal de Salud y Bienestar Social del Gobierno de

Tamaulipas en la detección de posibles casos que ingresen por los cruces

internacionales.

El Secretario de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval, respondió que la

SEDENA mantendrá y reforzará su presencia en Tamaulipas ante la contingencia,

a través de la aplicación del Plan DN-III. “Gracias Gobernador por su apoyo a las

Fuerzas Armadas, cuente con el nuestro para hacer estas revisiones en los cruces

fronterizos”, aseguró.

Entre las medidas que el Gobernador de Tamaulipas ha solicitado a la Federación

tras convertirse Estados Unidos en epicentro de la pandemia, se encuentra la de

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desincentivar las visitas de paisanos que por costumbre viajan a México en

Semana Santa y atender y regresar a sus lugares de origen a miles de migrantes

connacionales y extranjeros que permanecen estacionados en la frontera,

esperando cruzar hacia Estados Unidos o que han sido repatriados.