El ángel del Santo

Juan Carlos Jiménez
Agencia/Reforma
México, Monterrey

"Si mi papá fue el Santo, mi mamá fue un ángel".

Con esas palabras, el Hijo del Santo recordó a su mamá, una mujer que, afirmó, luchó por hacer felices y sacar adelante a sus 10 retoños.

En el Día de las Madres, el "Enmascarado de Plata" regresó su vida casi 50 años para hablar de su mamá: una señora que siempre ayudó a su padre y que tras su muerte, desde el cielo le mandó a su hoy esposa Gabriela.

"Ellos se conocieron cuando el Santo no existía.

Mi papá era un hombre muy humilde que estaba picando piedra en la lucha libre, eran muy pobres y cuando mi padre tuvo la bendición de convertirse en el Santo, a ella fue a la primera que quiso llenar de comodidades", reveló en exclusiva para CANCHA.

"Como yo fui el menor de los 10 (hermanos) tuve la gran dicha de disfrutarlos más a ellos (padres) porque ellos ya habían logrado que mis hermanos salieran adelante y yo fui como el consentido y que lamentablemente perdí cuando tenía escasos 20 años, fue un golpe muy duro, pero fue un ángel (mi madre) para mi padre y para todos sus hijos".

¿Y cómo llega Gabriela, tu esposa, a tu vida?

"Cuando conocí a Gabriela, ya mis padres no vivían.

Mi mamá murió dos años antes que mi papá y puedo decir con mucho orgullo que a Gaby me la mandaron ellos, porque yo vivía una etapa difícil en mi vida personal y cuando Gabriela llegó a mi vida se encargó de sanar las heridas".

El Santo afirmó que está a pronto a retirase como profesional y dejará a su hijo como el heredero de la leyenda plateada.

"Ahorita está estudiando sus clases de la universidad en línea, y yo no lo quiero obligar a que luche, pero él me dice que en cuanto termine la universidad, dentro de un año, va a regresar al ring a acompañarme.

"En un futuro, año o año y medio diré adiós, y ahorita que estoy bien qué mejor que hacer una gira y despedida digna y con Santo Jr.; tiene carisma, es un buen luchador y ya dependerá de él su conexión con el público", comentó el Hijo del Santo.