Regresa el beisbol al Estadio Héctor Espino

Sineli Santos
Agencia/Reforma
Cd. de México

En 2013 el estadio Héctor Espino, ex casa de los Naranjeros de Hermosillo, le cerró sus puertas al Rey de los Deportes.

Sin embargo, los 511 millones 690 mil pesos que el Gobierno Federal, a través del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) pagó por el "Coloso del Choyal" le volvió a poner los reflectores encima.

Para continuar con el proyecto de fomento y difusión del beisbol a nivel nacional, el inmueble será rehabilitado y utilizado como academia y centro deportivo de los programas de Probeis, siendo la Secretaría de Hacienda la encargada de pagar el mantenimiento.

Probeis espera que la escuela albergue a 60 alumnos anualmente de entre 15 y 18 años, contará con sistema de bachillerato tecnológico, preparación física "de excelencia", infraestructura y equipamiento especializado y, podría incluir residencia para los alumnos.

Además, en las zonas anexas como estacionamiento y áreas libres, se construirán plazas comerciales y hoteles, que tendrán como fin ayudar a recuperar parte de la inversión, aunque no se ha detallado en qué plazo.

"En el tema del uso que le vayan a dar a los estadios, todo lo que tenga que ver con el fomento al deporte, con academias, traer a los jóvenes a tempranas edades, lo vamos a apoyar en la medida de nuestras posibilidades", comentó Pablo de la Peña, presidente de los Naranjeros.

Con capacidad para 13 mil aficionados, el Héctor Espino fue considerado uno de los estadios más importantes en México y Latinoamérica al contar con una pantalla gigante, misma que fue colocada para la temporada 1991-1992.

También, el parque albergó seis Series del Caribe, la primera en 1974, y nueve juegos de pretemporada de Grandes Ligas.

La última vez que los Naranjeros jugaron en el "Coloso del Choyal" fue el 6 de enero de 2013 frente a los Tomateros de Culiacán.