En la Opinion
Pbro. Janet Pérez Domínguez
La Organización Mundial de la Salud (OMS) lleva tiempo usando la palabra "infodemia" para referirse a la sobreabundancia informativa falsa y a su rápida propagación entre las personas y medios.
La "infodemia" –tal es su nombre oficial, del inglés "infodemic"– es una práctica que genera pánico o promueve conductas incorrectas.
Y que aumenta el pánico y angustia en las sociedades.
En el libro de Números encuentro una historia casi parecida a lo que sucede actualmente, referente a nuestra reacción ante las “falsas noticias”.
Fue aquel día cuando los 12 espías llegaron de recorrer la tierra que Dios les había dicho que sería de ellos (la nación).
Moisés esperaba el reporte y Dios esperaba fe en ellos.
Desafortunadamente 10 de ellos dieron falsas noticias de lo que habían visto, fueron más las palabras negativas que se dieron a la gente que ánimo.
El resultado de esas falsas noticias fue confusión, miedo, y quejas en la gente. (Nada de fe).
Aunque Caleb pronunció pocas palabras fueron las suficientes para conocer su fiel y leal corazón a Dios.
¡Animó al pueblo a tener fe¡ Tristemente la gente fue más influenciada por la información negativa que la positiva. Con Dios si podremos, dijo Caleb.
El resultado de aquella información negativa y transgiversada de los 10 espías causó el disgusto de Dios pues no halló a un pueblo que confiara plenamente en sus promesas.
Necesitamos hoy más que nunca tener plena confianza y fe en las promesas de Dios, aunque que vengan falsas noticias acerca de nuestra vida y a pesar de que nuestra salud se vea amenazada, estemos seguros que hay un futuro prometedor y bendecido por Dios.
¡Las buenas noticas están vigente, Jesús es la buena noticia para la humanidad! Es tiempo de creer en Jesús pues en él está nuestra esperanza y en él está guardada nuestra vida.