Foto ilustrativa. EFE

EL PASO, TX.-

/REFORMA

Guardias de un centro de detención de migrantes en El Paso, Texas, agredieron y abusaron sexualmente a reclusas, de acuerdo con una denuncia presentada por el grupo de defensa Las Americas Immigrant Advocacy Center.

El sitio periodístico ProPublica obtuvo acceso a la denuncia, dada a conocer la semana pasada, que detalla que los guardias agredieron sistemáticamente al menos a tres personas en una instalación supervisada por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés), a menudo en áreas del centro no visibles para las cámaras de seguridad.

Los guardias les dijeron a las víctimas que nadie les creería porque no había imágenes y el acoso involucraba a oficiales con el rango de teniente.

Según la denuncia, los guardias besaron por la fuerza y tocaron las partes íntimas de al menos una mujer, quien dijo en entrevista que prefería regresar a México a seguir en el centro.

Según la queja, otra de las migrantes fue acosada por varios agentes. Uno de ellos le dijo que podía pagarle mucho dinero si tenía relaciones sexuales con él.

Al menos una de las mujeres involucradas ya fue deportada, señaló ProPublica.

Otra de las víctimas, un hombre, denunció que un guardia se le quedó mirando y después le frotó repetidamente los genitales.

Un portavoz de ICE dijo al sitio que la agencia estaba al tanto de las acusaciones y que serían investigadas.

"(ICE tiene) cero tolerancia para cualquier forma de abuso o acoso sexual contra personas bajo custodia de la agencia y toma muy en serio todas las acusaciones", escribió el portavoz en un email a ProPublica.

Tras hacerse públicos los hechos, dos mujeres más, una que estaba detenida en el centro de El Paso y otra que había estado ahí, han denunciado abusos.

Las acusaciones surgieron luego de que una mujer de origen salvadoreño que fue puesta en libertad debido a condiciones médicas relató a Las Americas Immigrant Advocacy Center la situación dentro del centro.

"Estas víctimas informan de un patrón de comportamiento sistemático de los guardias", dijo Linda Corchado, directora del grupo de defensa migrante, según recogen medios locales estadounidenses.

"Estos depredadores les lavan el cerebro a las mujeres, haciéndoles creer que pueden controlar su destino en materia de inmigración. Les dicen a las mujeres que no tienen poder, que no tienen derechos y que nadie les creerá".