Quizás ya sepas qué carrera quieres estudiar o pienses que aún tienes los tres años de la prepa para decidir. Sin embargo, es importante confirmar o ir trabajando en tu elección, y no porque sea inamovible, sino porque te ayudará a encaminar tus planes a futuro.

Así lo explica Florencia Rosso, college counselor del programa de Orientación Vocacional del Colegio Sierra Nevada plantel Interlomas.

"Hablar de orientación vocacional ya no sólo es la elección de carrera, sino la elección de un proyecto de vida, con metas específicas y objetivos claros, aunque después cambien", comparte la maestra en Psicoterapia Psicoanalítica.

Si aún no tienes idea de qué quieres estudiar, no te preocupes. Aunque existen cerca de 2 mil 500 carreras, éstas están agrupadas en cuatro áreas de estudio: Físico-matemáticas, Ciencias Biológicas, Ciencias Sociales, así como Artes y Humanidades.

Tus clases y actividades favoritas pueden ayudarte a delimitar el campo académico a estudiar en la universidad. Por ejemplo, si te gusta la tecnología, puedes inscribirte a alguna ingeniería.

Considera también que la elección de carrera toma tiempo y que varias cosas pueden gustarte a la vez.

"No existe una sola vocación en la vida, descubrir eso toma años, hay una parte del proceso de orientación vocacional que nadie puede garantizar", indica Rosso.

"El proceso de elección sólo se termina cuando el alumno está sentado en un salón de clases en la universidad y comprende lo que realmente eligió; por supuesto, hay posibilidad de que el proyecto cambie por completo".

Elizabeth Morales, académica del Departamento Psicopedagógico de la Prepa Ibero, añade que parte del proceso de elección de carrera implica evaluar aspectos internos de los estudiantes, como habilidades, intereses y rasgos de personalidad, al igual que factores externos.

"La orientación vocacional también toma en cuenta a la familia, el contexto en el que nos encontramos en el País, el campo laboral, los salarios promedio, eso es parte del proceso de decisión del proyecto que quieren construir".

Morales recomienda buscar en línea algún test de personalidad basado en Carl Jung e Isabel Briggs Myers, que arrojará rasgos de personalidad en configuración con ciertos aspectos laborales.

También propone realizar las pruebas DaP-2, de habilidades, y Explora, de intereses, del Instituto de Evaluación a Gran Escala. Ambas identifican el potencial de las personas para razonar con números, palabras y abstracciones, elementos requeridos en distintas carreras y ocupaciones (iege.mx/Pruebas/dat-2/).

Finalmente, sugiere consultar simuladores donde se presentan los salarios profesionales promedio y qué tanta empleabilidad tienen las carreras de interés, como el del Instituto Mexicano de la Competitividad (imco.org.mx/comparacarreras).

Toma en cuenta

La psicóloga Florencia Rosso aconseja seguir los siguientes pasos al momento de elegir una carrera.

1. Reconócete. Haz una reflexión profunda de qué quieres y quién eres; piensa en qué es lo que te gusta, con qué habilidades cuentas y cuáles necesitas reforzar para ese proyecto de vida a la que aspiras.

2. Haz tests vocacionales. Te ayudan a descubrir en qué áreas eres apto y para confirmar las habilidades que sabes que tienes e incluso descubrir otras que no tenías ubicadas.

Estas pruebas sirven de guía para explorar toda la oferta de una carrera o área profesional.

3. Consulta a expertos de tu prepa. Varias escuelas imparten materias de orientación vocacional, así como talleres y jornadas en las que ex alumnos del colegio platican sobre su experiencia profesional y comparten cómo fue su elección de carrera.

4. Visita universidades. Pide visitas guiadas en las instituciones que imparten la carrera o carreras que te interesan, para que conozcas el enfoque de cada programa y sepas cuál es el panorama laboral.

También puedes asistir a ferias educativas, para aprender incluso sobre la oferta académica de escuelas en el extranjero.

5. Integra a tus papás. Recuerda que no sólo eres tú eligiendo, sino que estás tomando una decisión bajo el sostén de la red de apoyo a la que perteneces, que es tu familia.

Por eso es importante platicar con ellos, para enterarlos de tus intereses, aunque la decisión es tuya.

6. Descarta focos rojos. Reflexiona si tu elección de carrera responde a tu propia expectativa o a la de alguien más: "quiero ser doctor porque en mi familia todos son doctores", "la carrera tiene que ser redituable económicamente, si no, no es opción", "quiero esta carrera porque está de moda", "mi mejor amiga va a tal carrera o país, yo también me voy".

Recuerda que la elección que tomes debe ser de tu agrado.

7. Tómate tu tiempo. Algunos jóvenes deciden hacer otras actividades antes de inscribirse en la universidad. Para descubrir o confirmar tus áreas de interés, puedes tomar talleres, cursar un idioma o hacer una actividad totalmente distinta, como un nuevo deporte, curso o un voluntariado.

8. Busca a un profesional. Si aún tienen dudas, hay pedagogos y psicólogos especializados en orientación vocacional que pueden ayudarte a aclarar tus pensamientos.