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Una familia llega al consultorio médico. Después de que otro ser querido atravesó un cuadro de Covid- 19, las personas están preocupadas porque unos exámenes que se practicaron dan señas de que están pasados de peso, tienen la presión arterial alta o la frecuencia cardiaca alterada.

Saben que son vulnerables ante el nuevo coronavirus y eso los angustia. Ahora quieren mejorar su salud.

Ésta es una escena que el cardiólogo Luis Eduardo González Carrillo ve en su práctica.

"La verdad es que estamos muy acostumbrados a negar la posibilidad de enfermarnos, pero al momento de que un familiar enferma nos damos cuenta de que somos frágiles", cuenta el especialista.

"¿Y qué pasa con el Covid? La gente compra un oxímetro, un termómetro, un monitor de presión arterial y eso hace que tengan a la mano dispositivos fáciles de usar.

Empiezan a detectar alteraciones y desequilibrios en casa y eso los lleva con el doctor".

Además, continúa, los nuevos pacientes suelen llegar con pruebas de colesterol y de triglicéridos, por ejemplo. Llegan a decir que notaron datos anormales y, tras buscar en internet, piensan que los kilos de más pueden ser los responsables.

En los siete años que lleva como experto en temas del corazón, indica, no había visto que una parentela entera acudiera a consultar de manera preventiva.

"Eso nos interesa como médicos, que las personas vengan antes de desarrollar molestias, a corregir números e indicadores que van a hacer que en el futuro sí desarrollen molestias", dice.

Este fenómeno es descrito por González Carrillo como un halo de la salud: los hace estar al pendiente del bienestar.

POR HÁBITOS SALUDABLES

Al ver que los pacientes llegan con altos niveles de colesterol o de triglicéridos, lo que recomienda el cardiólogo es un periodo de tres meses de gracia, en el que pide hacer ejercicio y llevar una dieta guiada por especialistas en nutrición.

"Si vemos un descenso (en los niveles) a los tres meses, excelente, vamos por un bien camino con estos buenos hábitos.

Pero si noto que hay hipertensión, forzosamente empezamos con tratamiento de pastilla que debe ir junto con el cambio de hábitos", comenta González Carrillo.

"Y esto es bien importante: si vienes conmigo, te doy medicamentos y sigues con los malos hábitos, seguramente en las siguientes semanas te voy a dar más pastillas y no va a haber progreso".

El cardiólogo admite que este cuidado de la salud no se hace para evitar la enfermedad, sino para tener al cuerpo en la mejor forma cuando llegue el siguiente reto de la salud, ya sea el Covid-19, una caída o un accidente automovilístico.

"Nos vamos a enfermar porque somos seres humanos.

Pero nos cuidamos para que, cuando llegue la enfermedad, estemos en las mejores condiciones.

Por eso invito a la gente a aceptar que somos vulnerables (ante los padecimientos) y que esto no nos lleve al miedo, sino al autocuidado y a la responsabilidad".

LOS SOSPECHOSOS HABITUALES

La hipertensión, el colesterol alto y la obesidad son algunos de padecimientos que "saltan" en las visitas preventivas con el médico.

"La hipertensión, el colesterol alto, el azúcar alto, el sedentarismo y la alimentación baja en frutas y verduras son las principales causas de discapacidades prevenibles, es decir, son las principales causas de arritmias, infartos, embolias y amputaciones de extremidades", expresa González Carrillo.

"También están relacionados con la pérdida de los años de vida saludable, o sea, un paciente que podría estar bien y sano hasta los 75 años sufre un infarto o una embolia a los 50.

Esto va a mermar la capacidad de llevar una vida normal, de trabajar, y va a incrementar la probabilidad de muerte prematura".

Los indicadores que las personas ya están notando anormales, entonces, son los signos que auguran un problema, aunque ahorita no se sientan los efectos.

Esto, agrega el cardiólogo, ya debe ser motivo suficiente de preocupación antes de considerar que también colocan a los individuos en mayores riesgos de desarrollar cuadros severos de Covid-19.

No por nada las personas con obesidad, hipertensión y diabetes son consideradas poblaciones de riesgo, expresa el especialista.

La obesidad, por ejemplo, genera trastornos internos metabólicos y factores inflamatorios, por lo que los padecimientos, no sólo el Covid-19, suelen ser más graves.

También trae alteraciones mecánicas respiratorias, donde la alta cantidad de grasa abdominal impide que los pulmones se expandan por completo.

Esto ayuda a enfatizar una vez más la importancia de prevenir: entre antes sean modificados los datos que auguran estas afectaciones, mejor.