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Está demostrado que ejercitarse de forma regular ayuda a la salud y a prevenir algunas enfermedades, no obstante, para mejorar la calidad del sueño, expertos recomiendan realizarlo durante el día, no la noche.

Adrián Chávez, preparador físico en Snap Fitness, explica que la elección de disciplina depende del momento del día, el tipo de entrenamiento, la duración y la intensidad con que se trabaja.

Además, si se opta por una práctica nocturna, un punto clave para lograr un descanso reparador son los ejercicios que te permitan relajarte y no activarte; que reducen el estrés y regulan la ansiedad.

"Me inclinaría más por entrenamientos aeróbicos con baja estimulación y de meditación: cardio de menos de 30 minutos y no superior a un 75 por ciento de la frecuencia cardiaca máxima, yoga o tai chi", dice.

Aunado a ello, enfatiza la importancia de cuidar los pulmones.

"La respiración lo es todo, ya que si hay apneas, el cuerpo se desequilibra. Si abusamos en la forma de respirar podemos tensar nuestro cuerpo y activando los músculos del pecho incrementamos la sensación de ansiedad", puntualiza.

Violeta Martínez, especialista en trastornos respiratorios del dormir, coincide en que es mejor ejercitarse por la mañana.

"No hay que realizarlo más allá de las 20:00 horas, ya que el ejercicio es activador y mejora nuestro estado de alerta, lo que puede interferir con el proceso de preparación del sueño en personas susceptibles", aclara.

Incluso los más afectados son aquellos que padecen insomnio, por ello, sugiere que antes de iniciar algún programa de actividad física regular, asistan a una valoración médica.

"Es importante acudir con un especialista del sueño para que te oriente sobre el tipo de ejercicio aeróbico más conveniente para ti o si requieres algún otro tratamiento", dice la doctora de la Clínica de Sueño CD de México.

Arma tu rutina

Los expertos sugieren esto para un sueño reparador:

- Realiza yoga, meditación, tai chi o algún ejercicio relajante.

- Inicia la práctica 4 u 8 horas antes de ir a la cama.

- Si eres sedentario, empieza por 10 o 20 minutos.

- Después de entrenar, evita cenas abundantes y alimentos industrializados.

- Si sufres insomnio, primero visita al médico para saber qué rutina te recomienda.