El mundo necesita romance y esperanza después de un largo período de sombras que nos ha dejado a su paso la pandemia.

Por ello, los principales diseñadores y firmas de todo el mundo apuestan por una temporada llena de belleza, aunque también con un toque romántico.

"Tras los períodos de crisis, no hay nada mejor que recurrir a los elementos suaves y delicados que remiten al amor. En este caso los plisados, los moños delicados, los pliegues y alforzas para lograr un estilo femenino, pero actual", afirma la experta Araceli Motta.

En las nuevas colecciones es posible encontrar muchos vestidos con toques boho chic, adornados con estampados de diversas flores o plantas, grandes mangas y faldas con mucho vuelo que se presentan en tonos que van desde los pasteles hasta los encendidos.

Las cinturas van marcadas por delgados cinturones para estilizar la figura de manera sutil.

Los materiales favoritos para jugar a enamorarse son los naturales como el lino, el algodón y la seda, combinados entre sí hasta lograr un estilo patchwork, ideales para mover las siluetas al compás del viento veraniego.

Arte en tela

Los escotes, ya sea redondos o cuadrados, se cierran coquetamente con nudos, y hay una cierta sensualidad inocente en todos estos diseños que lo mismo se pueden usar para el día que para la noche.

Aquí mostramos algunos ejemplos de la colección de Ulla Johnson, una diseñadora basada en Nueva York, en los cuales pueden apreciarse todos estos elementos mezclados de una manera artística y original.

Aparecen dos promesas del modelaje, Ajok Madel y Effie Steinberg, capturadas por la lente femenina de Yelena Yemchuk.