Monterrey, México(15 septiembre 2021).- No cargan mucho dinero ni ostentan lujos, pero entre sus pertenencias los migrantes que pasan por Nuevo León a veces traen algo muy preciado para "polleros" y delincuentes: contactos de familiares que viven en Estados Unidos.
Uno de los peores errores que pueden cometer los migrantes es decir en voz alta que tienen un familiar o conocido en Estados Unidos, pues se exponen a ser secuestrados para exigir rescate a sus contactos.
"Si (los polleros o coyotes) te encuentran números telefónicos de Estados Unidos, eso es para ellos oro molido", dice José Jaime Salinas, contador y coordinador de Casa Indi.
"Eso es: 'péscalo, tendrá un amigo, un familiar o algo'. Eso les sirve para pedir rescate o recompensa. Son presa muy fácil para ellos", agrega.
Mario, un hondureño que dice haber cruzado y sido deportado seis veces, narra cómo hace un mes y medio secuestraron a su hermana y la hija de 6 años de ella cuando transitaban en la Carretera a Nuevo Laredo.
"Pidieron 6 mil dólares por cada una", dijo. "Le hablaron a la familia que está en Houston, y debes de pagar, si no, ya no apareces".
Él mismo indica que fue secuestrado hace 10 años, cuando iba a Tamaulipas, y su familia tuvo que aportar para rescatarlo.
Romell, hondureño de 26 años, tuvo que rescatar a su hermano que estaba plagiada en Santa Catarina.
Usó sus únicos ahorros para enviarlo de nuevo a Honduras y ahora teme por su vida.
"Te quitan el celular y te revisan todo. A veces te quitan la ropa para que no tengas manera de huir", dijo.
Por eso, para muchos migrantes el silencio y el no denunciar a los polleros ha sido su única opción, pues los traficantes están al acecho.