Migrantes haitianos cruzando la frontera entre México y Texas. EFE

WASHINGTON

AGENCIA / EFE

Políticos demócratas, activistas y dirigentes religiosos arreciaron este jueves en sus críticas al Gobierno del presidente Joe Biden por lo que calificaron como "cruel y racista" tratamiento a miles de inmigrantes haitianos en la frontera sur.

El presidente del Comité de Seguridad de la Cámara de Representantes, el demócrata Bennie Thompson, y el presidente del Comité de Asuntos exteriores, Gregory Meeks, demócrata de Nueva York, instaron al Gobierno a que cese la repatriación en avión de haitianos que se encuentran acampados bajo el puente internacional de Del Río (Texas).

"Instamos al gobierno a que cese las repatriaciones hasta que Haití se recupere de sus crisis devastadoras", escribieron los legisladores en una carta enviada a los departamentos de Seguridad Nacional y de Estado.

Desde julio, Haití ha registrado el asesinato de su presidente, un poderoso terremoto y una tormenta tropical y, en consideración de ello, el Gobierno Biden extendió por 18 meses más el Estatus de Protección Temporaria (TPS) para los haitianos que ya viven en los Estados Unidos.

Imágenes de prensa han mostrado a agentes de la Patrulla Fronteriza, que, montados a caballo, actúan de manera agresiva y hostigan a los inmigrantes para evitar que los haitianos ingresen al país tras cruzar el río Bravo (río Grande).

"Estados Unidos no debería retornar a los haitianos a un país azotado por desastres naturales e inestabilidad política", sostuvo Frank Sharry, director del grupo de defensa de los derechos de los inmigrantes America's Voice.

"En cambio tenemos que trazar un rumbo nuevo proveyendo asistencia humanitaria a quienes la necesitan".

La Administración Biden, "como mínimo, debería suspender todos los vuelos de deportación a Haití, un país que el Gobierno mismo ha designado como uno al cual es peligroso deportar los migrantes", afirmó la representante Yvette Clarke, demócrata de Nueva York.

"Debe haber, asimismo, un incremento de recursos humanitarios del Gobierno federal para asistir a las personas necesitadas de alimento y amparo bajo un puente", añadió Clarke en una conferencia ante el Capitolio federal, en la que estuvo acompañada por una docena de legisladores demócratas.

Muchos de los haitianos acampados bajo el puente en Del Río "dejaron Haití hace más de una década y han estado viviendo en países como Chile, Brasil y Panamá", afirmó Patrice Lawrence, codirector de UndocuBlack Network.

"Se nos dijo que el Gobierno de Biden trabajaría para sanar las heridas raciales y abrir una era de inclusión para los migrantes", agregó.

"En cambio tenemos la misma actitud 'antinegros', la crueldad y la disfunción".

Mario Dorsonville, quien preside el Comité de Migración en la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU., exhortó al Gobierno a que "revalúe el tratamiento de los migrantes en Del Rio y otras partes a lo largo de la frontera con México, y especialmente de los haitianos que encaran condiciones peligrosas si retornan a Haití, y posible discriminación si son enviados a terceros países".