Monterrey, México(11 febrero 2022).- Muchas niñas son apasionadas por la ciencia y desde corta edad tienen gran curiosidad por comprender el mundo.

Pero los estereotipos de género, aún marcados en la sociedad, detiene a muchas pequeñas de seguir este camino.

Es a partir de los 6 años cuando las niñas comienzan a sentir que son menos brillantes que los niños de su misma edad y menos inteligentes para la ciencia, de acuerdo con el estudio realizado por la psicóloga Lin Bian, en 2017.

Y aunque cada vez más niñas y mujeres se involucran en estas áreas, aún falta un largo camino por recorrer.

La iniciativa 11F estima que el 30 por ciento de quienes se dedican a las ciencias son mujeres y sólo el 7 por ciento de las chicas cree que se dedicará a esto.

Hoy, Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, niñas que ya trazan su carrera científica tienen algo para decir.

LAS NIÑAS TAMBIÉN SON CIENTÍFICAS

Aunque en la actualidad hay mayor igualdad, dice Genoveva Pérez, antes no era así.

"Me imagino lo duro que fue para esas mujeres que quisieron ser científicas y que les decían que ellas no podían, que era para hombres", dice la niña de 11 años, quien cursa el sexto grado de primaria y sueña con encontrar la cura contra el cáncer.

Se describe a sí misma como una niña curiosa y que nunca deja de hacerse preguntas. Ha obtenido primeros lugares en concursos científicos con una tinta invisible y una cápsula para trasladar pacientes Covid que ella diseñó.

"Las mujeres tenemos los mismos derechos y somos iguales que los hombres", señala. "No veo por qué una niña curiosa no pueda ser una científica".

NO HAY DIFERENCIA EN EL GÉNERO

Romina Román ha escuchado en películas que las niñas no son tan capaces de ciencias como los niños, pero sabe que no es cierto.

"Escuché que ellas no sabían, no podían, que no eran igual de inteligentes las niñas. Que no se tenían que dedicar a eso", dice la pequeña de 9 años, alumna de cuarto año en la Primaria Hermanas Agazzi.

"Creo que deberíamos de pensar las cosas más de dos veces porque no creo que haya mucha diferencia entre el género".

Desde que era muy pequeña, Romina tiene una fascinación por el universo. Sueña con ser astrónoma para explorar el espacio exterior.

Fue premiada en ferias de ciencias por el desarrollo de un dispensador automático para croquetas y una masa tipo "slime" con ingredientes naturales.

TÚ DEFINES TUS LÍMITES

Han sido muchas veces las que Regina Salazar ha escuchado que la ciencia no es para niñas.

"Nos llegaron a decir: 'Mejor váyanse a barrer a su casa y a hacer tortillas, que esto no es lo suyo'", dice la chica de 13 años, estudiante de segundo de secundaria en la Escuela Guadalupe, en San Pedro.

"Pero yo desde pequeña he sabido decirle a la gente: Sí puedo, y lo voy a lograr".

Junto con sus compañeras, ha desarrollado proyectos científicos para ayudar al ambiente, que han sido ganadores de concursos de ciencias.

Aún no sabe si se quiere dedicar sólo a la ciencia, pero sí que le gustaría ser científica.

"No me parece que el género sea algo que tenga que definir tu fuerza o capacidad", apunta. "Tú defines tu misma capacidad y a veces te pones en el límite".

ELLA SABE DE LO QUE ES CAPAZ

Para todas las personas que piensan que las mujeres no son igual de capaces que los hombres, Fernanda Tamez tiene un mensaje.

"Que se informen de lo que está pasando y de lo que las mujeres son capaces porque podemos hacer lo mismo que un hombre", dice la pequeña de 12 años, alumna de segundo de secundaria en el Colegio Madison de Monterrey.

Junto con un compañero, Fernanda realizó una investigación para medir el impacto de la acción humana en los coatíes que viven en el Cerro de la Silla, iniciativa que logró movilizar a las autoridades ambientales a tomar acción en el tema.

Le gustaría ser bióloga cuando crezca y aunque en algunas ocasiones se siente insegura de ella misma, sabe de lo que es capaz.

"A veces sí dudo por miedo, pero no por ser mujer porque siento que soy muy inteligente y que tengo la fuerza para ser lo que quiero".

PROBARÁ QUE SÍ PUEDE

Cuando Emilia García habla de lo mucho que le gusta la ciencia hay quienes cuestionan su capacidad por ser mujer.

"Hay varias personas que me dicen: 'Pero ¿cómo? ¿Tú doctora?'. '¿No serías mejor enfermera?'. Dudan de que puedas hacer algo, que sería mejor un hombre", cuenta la adolescente de 15 años, estudiante de tercer año de secundaria en el Colegio Cambridge de Monterrey.

"Me gustaría poder cambiarlo, llegar a decir: 'Sí, soy doctora, sé tantas cosas y ayudé a tantas personas'".

Amante de la física y la química, Emilia desarrolló un limpiador ecológico a base de laurel y un prototipo de hospital temporal de Covid-19 en un estadio.

Ambos proyectos fueron premiados en concursos nacionales e internacionales.