Para que las personas con espectro autista cuenten con la solidaridad, sensibilidad y respeto de la sociedad, el Diputado Local por el IV Distrito, Marco Antonio Gallegos Galván, presentó una iniciativa de adición a la ley en la materia, a fin de que su desarrollo no sea afectado por la música, los cohetes o cualquier ruido que altere su integridad física y emocional.

El legislador de Morena señaló en el pleno legislativo que el ruido les afecta de manera importante, provocándoles dificultad en su concentración, ya que viven una experiencia sensorial totalmente diferente en la recepción de los estímulos no sólo auditivos, sino también en los sentidos del olfato, tacto y de la vista.

“El autismo se caracteriza por la intensa concentración de una persona en su propio mundo interior y la progresiva pérdida de contacto con la realidad exterior”, explicó el presidente de la Comisión de Grupos Vulnerables.

El trastorno del espectro autista es una afección relacionada con el desarrollo del cerebro que afecta la manera en que una persona percibe y socializa con otras, lo que causa problemas en la interacción social y la comunicación, expuso.

Manifestó que el autismo no se considera un diagnostico único, sino un conjunto de trastornos que tienen en común un cierto grado de alteración en el déficit de interacción social, problemas de comunicación y un repertorio anormalmente restringido de comportamiento e intereses.

Aunque no tiene cura, agregó, sí existe tratamiento que de realizarse adecuadamente puede contribuir eficazmente a su desarrollo y bienestar, pero su mejoría no depende de la educación, sino del tipo de autismo, el grado de afectación, así como su entorno familiar y social.

Gallegos Galván precisó que para ayudar a las personas que padezcan este trastorno, debemos integrarlos en la medida de lo posible dentro de nuestra sociedad, ayudándoles mediante actitudes positivas y acciones que fomenten el apoyo.

“En este sentido, el ruido a todo sonido no deseado que interfiere en la comunicación entre las personas o en sus actividades, es considerado peligroso, molesto, inútil o desagradable”, dijo.

Gallegos Galván recalcó que lo anterior provoca estrés que puede llevar a autolesiones, así como a agresiones físicas a terceros, llanto, gritos, taparse los oídos con las manos y otras reacciones impulsivas por no comprender ni tolerar lo que sucede alrededor.

Dulce Martínez, madre de Rosmeri Valentina, niña de 6 años, explicó que su pequeña empieza a gritar, solicita ayuda y se tapa los oídos, se tapa la cabeza con sábanas o almohadas, corre de un lado a otro, por el estrés y la ansiedad que le provocan los cohetes.

Uno de cada 160 niños de todo el mundo, sufren de trastornos del espectro autista, por lo que cada año se implementa una campaña para sensibilizar a la sociedad, a fin de reducir las consecuencias que podría provocar el fuerte estruendo de la pólvora.

El Diputado Local, Marco Antonio Gallegos Galván, presentó la iniciativa para adicionar la XXII al Artículo 10 de la Ley para la Atención y Protección a las Personas con la Condición del Espectro Autista del Estado de Tamaulipas, para sensibilizar a la población para que se solidarice evitando el ruido excesivo, de música y cohetes que les alteren su integridad física y emocional.